Duermo poco. Me despierto muy pronto y cuando lo hago procuro evitar toda metamorfosis, no tengo ningunas ganas de complacer a Kafka.
Me despierto y me asomo a la terraza, miro el cielo y aspiro. A veces, el aire me regala una sensación de bienestar tan magnífica que me hace feliz, tanto que me entran ganas de volver a la cama, de acurrucarme y recuperar el sueño perdido que el insomnio me arrebató. Me arrebujo.
La felicidad es un estado pasajero.
Me esfuerzo por recuperar el sueño y me digo: no todo el universo es un desastre.
Entre las sábanas acude otra vez el insomnio, ahora es la traición del insomnio matutino.
Todas las sensaciones (la llamada felicidad es una de ellas) son pasajeras. Y el universo no es ningún desastre, es que cimplemente no es nuestro y sigue su curso, mientras nos empeñamos en poner un cierto orden en nuestra devenor -personal y social- cotidiano. Pero el insomnio es aquello del demonio tentador que llega para provocarnos con mil y un pensamientos inabarcables en esos momentos. Pero a veces hay pensamientos luminosos o ¿acaso felices?
ResponderEliminarAmigo Fackel, las sensaciones son fugaces si algunas dejan unas huellas más o menos placenteras en el pensamiento.
EliminarEstá claro que el universo no es un desastre total, hay algunas cosillas que se pueden aguantar, por esto aún podemos dormir un poquito y soñar en los ángeles y los demonios.
Salud.
A las cuatro y cuarenta y cuatro me suelo despertar. No es broma. Siempre que lo hago miro el reloj y marca esa hora.
ResponderEliminarYa no me vuelvo a dormir.
Pienso y si me viene algo a la cabeza, lo escribo.
A las seis treinta ya estoy en la ducha.
Es lo que tiene hacerse viejo.
Un abrazote
Amic Miquel, está claro que te gustan los cuatros. Con el paso de los años uno gana en regularidad.
EliminarCuando me despierto ya no consigo volverme a dormir.
Un fuerte abrazo
Francesc:
ResponderEliminarpongo el despertador 5' minutos antes para aprovechar unos minutos más de entresueño.
Salu2.
Amigo Dyhego, supongo que esto del entresueño debe ser algo muy placentero. ¡Qué suerte tienes de poderlo disfrutar!
EliminarSaludos
A mí el especialista me dijo en su día que lo importante no era despertarse pronto y que era mucho más relevante acostarse pronto. Le hice caso y ahora duermo 7 horas, a veces 7,30. A pesar de que también madrugo (5 am). Me siento mucho mejor.
ResponderEliminarAmic Ricard, los especialistas son quienes más saben del asunto, seguir sus recomendaciones siempre trae consecuencias positivas.
EliminarTe envido por esto de que puedas llegar a dormir siete o más horas al día, hace muchos años que yo no lo consigo.
Abrazos.
El insomnio me persiguió durante muchos años de mi vida, pero ahora no es así. Duermo bien, ayudado por un placebo que me proporciona seguridad en el sueño. Pero algunas veces, cuando hay algún tema que me inquieta, me despierto de madrugada y todas las amenazas se ciernen sobre mí. La felicidad depende de las expectativas que tenemos en nuestra vida. Si no son muy altas, es posible que la felicidad se haga realidad de un modo más palpable. Aprendí con el taoísmo el concepto de Wu Wei que es fluir con el universo, no hacer nada forzado, dejar ir sin actividad alguna. Miro a mis gatos y veo que lo practican con una presencia absoluta en el aquí y el ahora. No hay nada que buscar, todo está aquí. Solo duermen, juegan, comen, se lamen. No buscan nada. Son. Y sí, ciertamente, no todo el universo es un desastre, es una sabia consideración, pero depende todo de la fortuna, de la serenidad con que afrontemos la realidad. Todo se tiñe con el color de nuestro espíritu, y si es un desastre, el universo también es un desastre.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
Amigo Joselu, a mí me gustaría dormir más de lo que duermo, pero no creas que me preocupe demasiado. Aquí, en el escrito, quería destacar la sensación placentera de algunos amaneceres que son una maravilla y sobre todo, comentar el auténtico goce sensitivo que me producen, es un goce sensitivo, casi material, que me provoca unas ganas de meterme en la cama otra vez.
EliminarLa felicidad es fugaz, pero no sé muy bien lo que es, seguramente es algo así como un bienestar del cuerpo y del pensamiento.
La vida de los gatos nos proporciona muchas enseñanzas, la tranquilidad y el tedio tan maravilloso da qué pensar. Duermen, se despiertan y deben pensar "ah mira, todo está aquí, pues me vuelvo a dormir".
No soy pesimista sino más bien escéptico, creo que el universo no es totalmente un desastre, hay aspectos que pueden ser positivos, y no me creo demasiado las teorías ilusionadas que pretenden explicarlo únicamente desde una perspectiva psicológica.
Saludos.
Con la edad se duerme poco,menos los jubilados,echados del proceso productor. Así que me he buscado un trabajo como canguro de mi nieto(8 meses).Mi hija nos deja el bebé a las siete de la mañana y se va al trabajo.No importa,recupero el sueño con Netflix,entregandome dulcemente.
ResponderEliminarSaludos
Amigo Car res, pasan los años y cada vez dormimos menos.
EliminarNunca he sabido que cosa es esto de Netflix, creo que es algo de cine. Nunca voy al cine y hace muchos años, muchos que no he visto ninguna película ni por televisión.
El proceso productor, en mi profesión no acaba de echarnos nunca, siempre nos ocupa la mente y de una manera u otra, con más o menos tranquilidad continuamos con los proyectos.
Saludos.
Qué bonito has descrito ese instante feliz !!
ResponderEliminarSuelo dormir muy bien, aunq aguna vez he experimentado el insomnio y nada más desesperante ...Pero nada tan energizante como saltar de la cama calentita ...salir al porche, sentir el frío helado de sopetón, escuchar un segundo los pájaros y correr a arrebujarte de nuevo bajo el edredón calentita ...Mmm.. incluso si no te duermes, no importa ..como pasar del infierno al cielo ..una delicia...a veces, muchas, lo hago tb con la ducha, como si te metieras un chute de vida ; ) Un beso y buen finde!
Querida María, muchos amaneceres proporcionan unas ganas de arrebujarse que es un contento.
EliminarCelebro que duermas bien, esto es una señal de buena salud, lo dicen los médicos, sobre todo los de antes.
Me despierto muy pronto y si no puedo dormir más, tampoco me preocupo, pienso: "ya dormiré, el universo no es totalmente un desastre".
Abrazos mil
Veo que aquí se está formando un nutrido "clan de los insomnes". Entre ellos, el más madrugador es Miquel, sin duda, el hombre "todo cuatros". Yo me suelo acostar tarde. Me despierto pronto, más o menos a la misma hora que el susodicho Miquel, pero confieso que la ducha nunca la he vuelto a visitar a las seis de la madrugada desde que ya no voy a Ripollet a "impartir doctrina" (dar clase a zangolotinos).
ResponderEliminarÚltimamente, mi despertar se produce "gracias" a alguna macabra pesadilla, un poco del tipo de la que representa el cuadro de Klimt que adjuntas parcialmente. Es casi como si viniera una bella y perversa Judith a arrancarme la cabeza, cual la de Holofernes, y tomármela por la cabellera, inexistente en mi caso. Lo he de consultar con mi psicoanalista argentino en la chaise longue.[En la obra de Klimt entera sí que vemos las manos retorcidas de Judith y la cabeza del "pobre" Holofernes. Y es que me gusta mucho Klimt. Es un tema que ha dado mucho juego entre los pintores, el gran Caravaggio entre otros. Algo parecido al asunto de Salomé y San Juan Bautista, también tan común].
Me levanto entonces discretamente, me doy un paseo por la casa y, si no hace frío, permanezco unos minutos en la terraza viendo el poco trozo de cielo al que tengo acceso. Eso me permite regresar a la piltra y a veces consigo volver a dormirme. Para ello siempre procuro pensar en cosas agradables y no en lo malo que me pueda deparar el día. No siempre funciona, pero ya no tengo pesadillas.
Un abrazo
Amigo Gran Uribe, creo que podríamos formar una asociación de insomnes y nombrar a Morfeo de presidente y el anagrama de la asociación habría de tener la imagen de un lirón y la música de bienvenida a los nuevos socios sería una nana.
EliminarKafka dijo que el despertar es el momento más arriesgado del día. No sé, yo creo que el riesgo es la mala educación que nos rodea.
El fragmento del cuadro lo he puesto para destacar la peca que luce Judith en su mejilla izquierda, ese Klimt era tremendo. En todas las representaciones que he visto de Holofernes siempre es una cabeza grande, fea y con mucho pelo.
Si vas a un psicoanalista te recomiendo que observes con atención la "chaise longue", suelen estar bastante sucias.
Un abrazo.
Un insomne más. Me despìerta el gallo (som de mas), y ya no cierro los ojos ni los oídos. Auriculares, Carlos Herrera (hay días que le mataría), Àngels Barceló, Jordi Basté y desayunando, Susanna Griso. Paso de ir al quisco.
ResponderEliminarAmigo Toy, parece que esto del insomnio ya es una epidemia, como le he dicho a nuestro amigo Gran Uribe, creo que estamos en condiciones de formar una asociación de insomnes.
EliminarNos despertamos y ya empieza el ruido, las tertulias, el parloteo, la música caribeña, el trajín callejero... es que no nos dejan tranquilos.
Salud.
Hay un sueño que disfruto mucho y es el de la mañana temprana, aunque pocas veces puedo permitirme ese lujo. Ese momento feliz que has descrito me lo ha recordado. Meterse entre sábanas aunque no se acabe de conciliar el sueño es una delicia.
ResponderEliminarSalud
Sí, Milena, despertarse, contemplar la belleza matutina y arrebujarse.
EliminarUna sensación palpable, casi material.
Saludos
La felicidad, siempre fugaz, está tanto en lo que se vive como en lo que se sueña, en la noche... Con los años, se vive menos y se sueña (duerme) menos... Creo que es ley de vida...
ResponderEliminarUn abrazo, amigo
Amigo Ildefonso, en efecto la felicidad es algo fugaz, pasa como una exhalación, una centella que deja sus huellas. Con los años vamos perdiendo vitalidad tanto de día como de noche. Aceptamos las leyes naturales, la ley de vida.
EliminarUn abrazo
Dicen que con los años el sueño se vuelve más necesario que la realidad que cuvimos, de ahí que nos cuesta tanto Despegarnos de las sábanas. Me encanta Klimt
ResponderEliminarAmiga Mónica, el sueño es reparador. Despertarse y contemplar un día claro es una delicia.
EliminarMe gusta Klimt, creo que supo interpretar muy bien ciertas ensoñaciones que se daban en aquella sociedad de principios del siglo XX.
Salud
Haverá algum método natural de combate à insónia?
ResponderEliminarAbraço amigo.
Juvenal Nunes
No lo sé, Juvenal, creo que algún entendido en botánica podría aportar algún remedio.
EliminarSaludos.