Materiales para la escultura

El escultor practica dos técnicas bien diferenciadas, la talla y el moldeado. En la primera, su trabajo consiste en ir eliminando material para dejar el volumen convertido en una obra de arte. Utiliza el cincel, corta con el escoplo o martillea con el mazo para sacar una estatua de un gran bloque de piedra o de un tronco de madera.

En la segunda, el moldeado, lo que hace el artista es añadir materia, dándole forma como si la acariciara y conseguir, caricia tras caricia, la obra de arte que su mente ha ideado.

Ya sea eliminando o añadiendo materia, el caso es llegar a conseguir la obra escultórica imaginada.

Elegirá con cuidado el material: rocas, metales, argamasas o lo que él crea conveniente de acuerdo con su idea. Sabe, el artista, que a una determinada escultura le corresponde un determinado material, pues sería error esculpir el rostro de Ofelia en piedra dura, aquella joven de corazón sensible no puede ser representada con un material tosco.

Así, pues, tanto el material como la técnica escogidos deben estar acorde con la idea y con la definición del volumen. Puede optar por una limitación del vacío o por la compactación de la materia dentro de un espacio preconcebido. 

He aquí algunas propuestas de materiales:

Material	Obra escultórica
Mármol de Carrara	Helena de Troya
Granito	Nabucodonosor Wotan
Basalto	Zaratustra
Piedra berroqueña	Carlos V Iván el Terrible
Piedra pómez	Ángeles caídos
Piedra serena	Dante Alighieri Beatrice Portinari Lorenzo el Magnífico
Alabastro	Simonetta Vespucci
Hormigón	Barbarroja خير الدين بربروس Pablo de Tarso
Bronce	Ulises
Oro	Zeus
Ébano	Salomé
Madera de palisandro	Toro Sentado
Madera de sicomoro	La monja enana
Madera de tilo	Monumento a algún poeta romántico alemán
Cerámica o gres	Dulcinea
Arcilla	El Visir de Damasco Sherezade y Simbad
Barro	Manelic el pastor
Plastilina	Monumento a los que asisten al triste espectáculo
Carne humana	Robespierre
Materia fecal	Torquemada
Trapo	La mujer de Putifar  פּוֹטִיפָר La monja alférez
Material reciclado (plásticos, gomas, zapatillas…)	Cipo o estela deconstruida al urbanista esperanzado