miércoles, 30 de noviembre de 2022

Gaudí, panteísta y trascendente



Cuando en este blog he escrito algo sobre Gaudí, casi siempre lo he hecho para opinar acerca de los aspectos constructivos o estructurales de su obra.


He estudiado la obra de Gaudí desde muchos puntos de vista y he llegado a la conclusión de que no lo entiendo. No entiendo su concepción del espacio, no entiendo su obstinación por conseguir que todos los elementos estructurales de su obra trabajen a compresión, su tratamiento fundamentalista de las estructuras y no entiendo los planteamientos formales que derivan de tanta obstinación.


Afirmo que Gaudí es Gaudí, que su arquitectura es simbólicamente aberrante en el mejor sentido de la palabra, que su obra no encaja ni en su tiempo ni en el espacio, que su penetración en la concepción del espacio arquitectónico es antiespacial, que su empecinamiento naturalista es antiarquitectónico, que es un gran creador de formas, que su repertorio formal no se acaba nunca, que su construcción es panteísta y sometida a fuerzas extrafísicas con las que quiso expresar alguna trascendencia pétrea.


De todas maneras, y salvando todas las veleidades simbolistas y religiosas, creo que hay que valorar aquel Gaudí expresionista cuyas propuestas formales eran mucho más rupturistas que los otros arquitectos expresionistas europeos.


Gaudí es Gaudí. Sólo, inexplicable, genuinamente aberrante.

lunes, 28 de noviembre de 2022

Algunas maravillas

 

 

Dejando aparte la satisfacción que me produce la contemplación del arte y los placeres de la cocina, debo reconocer que hay algunas otras maravillas que me acompañan: 

 

El Sistema Métrico Decimal

El cielo azul del Mediterráneo

La intimidad y privacidad del pensamiento

El amor filial

La fuerza de la voluntad

          El entusiasmo de algunos jóvenes

sábado, 26 de noviembre de 2022

Poesía y alcaparras


Admiro profundamente la poesía de Petrarca, creo que sus sonetos son un faro potentísimo que ilumina toda la cultura europea.


Estoy convencido que la belleza de sus versos sólo puede salir de la pluma de alguien que tiene un sentido de la proporción extraordinario, de un poeta con un gran sentido del humor y que sabe comer muy bien.

 

Petrarca escribía con el estómago saciado, probablemente después de haber comido un buen plato de spaghetti alla Pantelleria acompañado de unos traguitos de chianti de su Arezzo natal.

 

Después de una siesta escasa y creativa, el poeta despertaba con los ojos despejados y con la mirada plácida. Entonces era capaz de componer los más bellos sonetos a su Laura, y escribir un librito cargado de humor e ironía como su “Diálogo entre el Gozo y la Razón” 

 

GOZO.- ¡Tengo muchos e diversos libros!

RAZÓN.- La diversidad de los caminos, muchas vezes, engañan al caminante, y el que por un solo camino yva cierto, dudo en dos, y mucho más en tres o quatro. E assi al que solo libro pudiera aprovechar, sin provecho revolvió muchos. La diversidad de las cosas es difficil a los que aprenden; a los ya enseñados poco les basta, e lo demasiado a los unos e a los otros es importuno: verdad es que los más rezios hombres suffren mejor la carga.


Los spaghetti con alcaparras avivan la mirada y ayudan a relativizar.

jueves, 24 de noviembre de 2022

El estrecho fatídico

Joan Ponç 

 

Sus pasos dejaron huellas negras:

soy la oscuridad del estrecho fatídico.

 

Entre Escila y Caribdis

naufragaron el arte y la razón

y la voluntad sucumbió

con el canto de las sirenas.

 

Entre las dos rocas, la noche

acometió contra la geología

la fealdad de los cuerpos

y la locura de la mente que crea.


Soy el espíritu que todo lo niega

y no me desasosiega que todo perezca al fin

porque soy destrucción.


Negó las flores enardecidas

y el disco de sol anaranjado

que aparece en mis pupilas

cuando cierro los ojos.

Son ilusiones del olfato y la vista,

sentidos que, no en balde, la Ciencia

escruta con la divinidad del cálculo.


Con los ojos cerrados y sin ningún sentido,

todo nació de la oscuridad.

F.C.

 

Odiseo enfrentándose a la elección entre Escila y Caribdis. 

Henry Fuseli, 1794

lunes, 21 de noviembre de 2022

La línea

 

Toyo Ito, alojamiento para una mujer nómada

 

En arquitectura, toda línea es materia. No existe la línea abstracta, esta sólo está en los teoremas matemáticos.


Cualquier línea en un plano de arquitectura es una pared, un techo, una representación de algo que cobija...


La línea es una intersección de superficies corpóreas, un muro con su grosor, una cornisa, el límite de una jamba o de un dintel, el perfil de un frontón jónico, una estría dórica, un escalón o una limahoya.


Las líneas de fuerza son vectores, alineaciones de moléculas metálicas o pétreas que soportan empujes y se comprimen o torsionan, flexionan o se separan. Las líneas de fuerza son abstracciones funcionales que nos sirven. Son como la conciencia que sirve para algo pero que no tiene cuerpo.


El arquitecto debe dibujar lo que sirve, la materia bella, el techo que cubre y el volumen que envuelve la vida.

Dibujos del proyecto de Olmstead para Central Park en la isla de Manhattan 
 

Aprecio y admiro la linealidad de aquellos dibujos que son especulación y reflexión sobre la forma, tanto en arquitectura como en urbanismo, pero aborrezco la retórica de la línea incorpórea que tanto abunda en una arquitectura fatua que solo es el dibujo de una petulancia.