Alegoría de la guerra. M. Zuloaga
Las guerras traen consigo el dolor, la muerte y la devastación. Luego, vencedores unos y vencidos otros, finalmente, alguien emprende la reconstrucción que suele generar unos negocios muy lucrativos. Después de la masacre se reconstruye y si conviene, se construye ex novo.
La guerra se celebra de una manera u otra. Cada cual la celebra a su manera y siempre lo hacen construyendo, naturalmente.
Los vencedores levantan edificios monumentales, casi siempre desproporcionados, para ensalzar la victoria, y los vencidos suelen levantar arquitecturas dolientes, también monumentales, para honrar la memoria de los que sufrieron dolor y muerte.
Ejemplos, en un sentido u otro, los tenemos a lo largo de la historia. Cito dos ejemplos europeos: Befreiungshalle en Alemania y la Basílica del Sagrado Corazón de Montmartre en París.
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La Befreiungshalle (sala de la liberación) es un monumento levantado por los vencedores. Se construyó en Kelheim en la ribera del Danubio para celebrar la victoria alemana sobre Napoleón I.
Promovió la construcción el rey Luis I de Baviera. La obra comenzó en 1842 bajo la dirección del arquitecto Friedrich von Gärtner y se terminó en 1863 bajo la dirección del arquitecto Leo von Klenze. Se trata de un edificio de planta circular cubierta con una magnífica cúpula y con una fachada con dieciocho columnas adosadas que están coronadas con estatuas alegóricas del ejército alemán.
En el dintel de la puerta de acceso a la Befreiungshalle podemos ver una inscripción que dice:
DEN
DEUTSCHEN BEFREIUNGSKÄMPFERN
LUDWIG I KÖNIG VON BAYERN
A los luchadores de la liberación de los alemanes
Luis I rey de Baviera.
La Basílica del Sagrado Corazón de Montmartre (París), es un monumento levantado por los vencidos.
Se construyó para recuerdo y homenaje a los ciudadanos franceses que habían caído en la Guerra Franco-prusiana que tuvo lugar en 1870 y 1871, cuando Segundo Imperio Francés sucumbió perdiendo la guerra ante el ejército del Reino de Prusia que posteriormente se convirtió en el Reich alemán. Prusia tuvo el apoyo de la Confederación Alemana del Norte y los reinos aliados de Baviera, Wurtemberg y Baden.
La construcción de la basílica fue aprobada por la Asamblea Nacional Francesa en 1873. El proyecto se debe a Paul Abadie, un arquitecto que seguía la corriente medievalista y hasta cierto punto, en cuanto a los trazados se refiere, una adscripción al bizantinismo.
Es un edificio de cruz griega, con una cúpula central terminada con una linterna, alcanzando el conjunto una altura de 80 metros. Predominan las formas circulares, algo que me hace pensar que este tipo de edificios recurren habitualmente al círculo, como hemos visto, también en la Befreiungshalle bávara.
Al final resulta que vencedores y vencidos, se dedican a la construcción y casi siempre recurren a las formas monumentales y circulares.
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Conozco la de Paris, pero siempre es lo mismo, primero se destruye y luego se construye. Lo que debiera ser enseñanza cuando se construye nunca se aprende, siempre volvemos a los mismos errores y no hay que mirar muy lejos para verlo.
ResponderEliminarUn saludo.
Amigo Daniel, construyen los vencedores y los vencidos.
EliminarYo no sé si he aprendido demasiado después de tanto construir, lo que sí sé es que es mucho más fácil destruir que construir. Puede destruir cualquier descerebrado, pero construir ya es otra cosa, desde luego mucho más compleja.
Saludos
Va con los seres vivos, incluido el hombre. Se destruye un hormiguero y tarda poco en ser reconstruido. Lo mismo las termitas, los nidos de las aves. Guerra, paz, reconstrucción, ciclo vital .Me resulta curioso, el león joven que mata las crías de la leona, que quedó preñada por el león viejo. La leona queda preparada para nuevos cachorros, esta vez del león joven. Saldrán crías más fuertes.
ResponderEliminarSaludos
Amigo Car res, nos vemos obligados a reconstruir, si no fuera así, con tantas guerras como ha habido, casi todo sería un paisaje de ruinas.
EliminarTermitas, aves, leones, todas estas cosas de animales me resultan casi desconocidas, supongo que todo es cuestión de la selección natural e ir mejorando la especie.
Saludos.
Como me
ResponderEliminarencuentre
una estatua
como esa ,
la jinco al
suelo .
Amigo Orlando, ja, ja, ja, ten cuidado con los bronces, algunos pueden devolverte el golpe.
EliminarAbrazos.
Solo sé que la paz no nace cuando la guerra termina. Hay mil ejemplos de ello.
ResponderEliminarUn abrazo
Miquel, a veces llegamos a pensar que la guerra se convierte en un estado permanente.
EliminarEl caso es que muchos están interesados en la reconstrucción.
Abrazos
Al margen del motivo y lo que conmemoran estas dos construcciones el edificio circular es cuando menos curioso y La Basílica de Montmartre absolutamente impresionante, sin duda que sí.. Supongo que es una manera de resarcirse de la miseria pasada, una especie de lanzamiento de fuegos artificiales al cielo que hagan olvidar la barbarie sufrida, pero sí, no deja de ser curioso la cantidad de monumentos que se levantan tras las guerras.. Estos son circulares pero los hay de todas las formas geométricas, Arcos del triunfo, esculturas y monumentos conmemorativos de toda índole, hasta cementerios. Nosotros tenemos nuestro Valle de los caídos, lo único bonito de ese monumento era el nombre y creo que lo han cambiado por uno horroroso ; ) En el fondo parece que nos gusta hacer apología de las guerras y lo peor, tanta conmemoración edificativa y a la primera de cambio se vuelve a volar todo por los aires..
ResponderEliminar¡ Qué poco aprendemos! Gracias. Un beso!
Querida María, tanto a los vencedores como a los vencidos les entran unas ganas tremendas de levantar monumentos, una característica bastante común es la desproporción.
EliminarPiedras apologéticas de la barbarie.
Abrazos mil
Ah! y sí, no lo dudes, uno de los negocios más lucrativos que existen son las reconstrucciones tras el fin de las guerras ...construimos para volver a destruirlo todo de nuevo.. somos así de descerebrados : (
ResponderEliminarSí, María, "Cui prodest", los beneficios son impresionantes.
EliminarCon tanto negocio tan lucrativo no es extraño que algunos estén encantados con las guerras.
Abrazos mil
La esencia de los humano es contradictoria y complementaria. Guerra y destrucción frente a pacificación y construcción. Linea recta, lanza y vanguardia, contra círculo, cueva y exclusión.
ResponderEliminarAmigo Julio, el ser humano es contradictorio y peleón. Muchas veces busca la paz a garrotazos y fabrica armas para evitar las guerras.
EliminarAplaudo, Julio, esta oposición de términos que mencionas: "Línea recta, lanza y vanguardia, contra círculo, cueva y exclusión".
Saludos
Muy curioso todo lo que nos explicas, Francesc. Gracias, una vez más, por tus clases magistrales.
ResponderEliminarUn abrazo
Amigo Luis Antonio, celebro que te gusten esta pequeñas reflexiones sobre arquitectura y arte en general.
EliminarNunca pretendo que sean explicaciones magistrales.
Abrazos.
Sobre Sacre-Coeur en octubre de 2020 la Asociación des Amies et Amis de la Commune de Paris publicaba esta nota en su web:
ResponderEliminar"NO A LA INCLUSIÓN DEL SAGRADO CORAZÓN EN MONUMENTOS HISTÓRICOS
"La comisión regional de patrimonio y arquitectura de Île-de-France acaba de votar a favor de incluir el Sacré-Cœur de Montmartre como monumento histórico, con el apoyo de Madame Bachelot. A pocos meses del 150° aniversario de la Comuna, esta decisión parece una verdadera provocación.
En la mente de sus promotores, la basílica conocida como el "Voto Nacional" tenía el comprobado objetivo de expiar la "decadencia moral" provocada por las revoluciones desde 1789. Luego de las masacres de la Semana Sangrienta, en 1871, su construcción fue apoyada por la mayoría monárquica y católica de la Asamblea que lo vio como un edificio de venganza y no de reconciliación. El Sagrado Corazón es, pues, al mismo tiempo el signo tangible del “orden moral”, el símbolo por excelencia de la “anticomuna” y un insulto a la República lanzado por quienes la combaten. Que se elija un lugar de culto para esta negación democrática no es digno ni de la República ni de una parte significativa del mundo cristiano que hoy se reconoce en los valores humanistas de la Comuna.
El 29 de noviembre de 2016, la Asamblea Nacional aprobó una resolución rehabilitando a los comuneros condenados y solicitando que se hicieran esfuerzos para dar a conocer los logros y valores de la Comuna. A finales de 2020 se dio la respuesta: son los masacradores los que queremos destacar; Siempre es la anticomuna lo que pretendemos conmemorar. En estos tiempos de agitación de la conciencia republicana y democrática, esta decisión asusta.
Que todos los herederos de la Comuna, sin excepción alguna, los republicanos se encuentren pues en su más total rechazo. "
Otro gol que los triunfantes metieron a los vencidos, con la cruz y el evangelio convertidos en templo expiatorio ¿de qué?
Amigo Fackel, todos los monumentos erigidos con motivo de una guerra, tanto si son levantados por el vencido como si los ha levantado en vencedor, son la petrificación de una ideología, -de un signo o de otro- Naturalmente los de un color aborrecen el color del otro y con un mallo en la mano son capaces de derribar cualquier petrificación que no esté de acuerdo con su ideología.
EliminarLa Sacré-Cœur de Montmartre fue aprobada por la Asamblea Nacional de Francia. Es un monumento religioso levantado a la memoria de los que murieron el la guerra franco-prusiana.
Cuando se propuso su construcción, la Asamblea Nacional quería restituir un "orden moral" determinado, aquel orden que ellos creían adecuado a su ideología en aquel momento (1873).
Cuando se declaró la Tercera República, el arzobispo Felix Fournier, en una carta a los sacerdotes de su diócesis, decía que la derrota de Francia en aquella guerra -la franco prusiana- había sido un castigo de Dios por la decadencia moral de Francia tras la Revolución Francesa.
La Sacré-Cœur de Montmartre es un edificio religioso, que con sus sillares de piedra caliza blanca, los constructores querían redimir los pecados.
Siempre aparece un redentor que suele predicar desde la montaña como Zaratustra.
Esta iglesia desproporcionada fue declarada de utilidad pública por la Asamblea Nacional en 1873.
Es un edificio que constó mucho construirlo, especialmente sus cimientos. Creo que son cimientos de arcos invertidos, pero de esto no estoy muy seguro. Se eligieron con mucho cuidado los materiales, se utilizó una piedra calcita de buen mantenimiento. Su estilo recuerda el bizantino y las polémicas que ha generado la Sacré-Cœur recuerdan el bizantinismo de los colores natales de los azules y los rojos de Constantinopla.
Desde el punto de vista arquitectónico, yo no sería partidario de incluirlo en el catálogo del patrimonio arquitectónico mundial. No me gusta su monumentalidad desproporcionada.
Me parece que ICOMOS de la UNICEF no lo ha incluido.
Otra cosa es su significación histórica o ideológica que esto requiere una consideración que a mí, particularmente, se me escapa.
Un fuerte abrazo.