Una
de las bondades del sistema democrático es que todos los votos valen lo mismo.
Aunque, por el peso de sus pensamientos, algunos toquen de cabeza al suelo o se muevan patas arriba y vayan al revés, todos gozamos de esta bondad democrática. Todos los votos que se depositan en las urnas tienen el mismo valor.
Esto es así, de lo contrario, sería clasismo.
Bondades y paradojas, más allá de la metáfora de las fotografías y de tu entrada.
ResponderEliminarY siempe la duda: los votos valen lo mismo desde un pounto de vista cuantitativo, evidentemente. ¿Desde el cualitativo?
Es una pregunta retórica, no pido respuesta, acaso esta ya va implícita.
Amigo Fackel, la cuestión es que la bondad y la paradoja estén bien dimensionadas.
EliminarSaludos
Como es evidente,no son movimientos para nuestra edad,pero para esos jóvenes representa una forma gratis de quemar testosterona,adrenalina y calorías. hasta se olvidan de las drogas.
ResponderEliminarSaludos
Amigo Car res, ellos queman testosterona y es mejor que sea así, lo alarmante son otros incendios.
EliminarSalud
Yo suelo hablar más claro:
ResponderEliminarLa dimensión de la bondad democrática que mencionas es inversamente proporcional al número de imbéciles que hay en la ciudadanía.
Cuantos más imbéciles, menos bondad tiene el derecho de marras.
Yo no, Noxeus, no suelo hablar claro, me valgo de la ironía.
EliminarMe gustan las proporciones inversas y me desagrada y preocupa el incremento del número de imbéciles.
Saludos
jaja esta es la típica entrada tuya maravillosa llena de irnonía, que yo nunca sería capaz de hacer, porque me dedicaría a explicar por qué y por que no buscar la forma para que sin ser clasista, ni limitar el derecho a todas las personas preparadas para ejercer el derecho a sufragio, sin embargo pase un filtro.. porque lo siento, no puede valer lo mismo el voto de un descerebrado inconsciente o a quien han manipualdo vilmente, que alguien que ha meditado profundamente su opción política.. Ni puede valer lo mismo el voto de un abuelito que lo sacan del asilo hecho una acelga y le colocan el sobre que debe votar en la mano.. y así, mil supuestos en los que se les está dando la posibilidad de ejercer su derecho al voto a personas que ni están capacitadas cerebral, cultural, ni emocional.. ¿ soy clasista? en absoluto.. solo veo la realidad, pero no interesa.. cuando más tontos seamos más fácil lo tiene los políticos nefastos y populistas para ganar : )
ResponderEliminarUn beso enorme, mi querido Sr. ironía ; )
Querida María, ayer vi un individuo que estaba con la cabeza para abajo e iba dando vueltas, un grupo de gritones aplaudía y chillaba, entonces me vino a la mente un colegio electoral con sus urnas dispuestas y pensé en la gente que también iba de cabeza para depositar su voto. Pensé en cerebros y en descerebrados, en gente que va dando vueltas y otros que están "paliplantados", pensé en el valor de los votos, pensé en personas clasistas y otros que no saben que significa el clasismo... el caso es que la diversidad da mucho margen para la reflexión, seguramente cuanto más andemos con la cabeza por los suelos, mayor será degradación democrática.
EliminarAbrazos mil.
Un día , una
ResponderEliminarcucaracha
se encontró
a otra haciendo
lo mismo que
los de las
imágenes,
y le pregunta,
"Que?,
break dance?,"
y aquella responde
"No, Baygon" ,
ahí lo dejo.
Ja, ja, diálogo de cucarachas.
EliminarNo me lo había planteado nunca, palabra. Pero has abierto una puerta.
ResponderEliminarBien es cierto que, desde mi perspectiva, no puedo presumir que mi voto valga más que el de otra persona, pero me da pie a pensar que no puede valer lo mismo un voto de una persona que piense que "el dinero que cobran los viejos ¿para qué lo quieren?, si a mí sí que me hace falta" (sic), que el de un joven que no tenga esa idea en su cerebro.
Los dos votos no pueden valer lo mismo, como no sabe igual un vino guardado en una barrica durante años que el mismo vino, si se le pone a posteriori, agua.
Un abrazo
Amigo Miquel, en caso de establecer una gradación del valor de los votos resultaría muy difícil determinar las categorías y saber dónde poner los límites. Creo que lo más positivo es elevar el nivel de concienciación y conocimientos y de los ciudadanos para que se pueda hablar de una verdadera calidad del voto. Ahora, a la vista del informe PISA, en las urnas se podrá encontrar de todo.
EliminarAbrazos
Buenas tardes, esto debiera ser asi , pero no lo es. Yo voté a UPYD en 2.011 y esta formación obtuvo 1 143 225 votos y de esos votos consiguió 5 escaños. En esas mismas elecciones CIU consiguió 1 015 691votos y le dieron 16 escaños.
ResponderEliminarA mi partido cada escaño le costó 228.645 votos y a CIU le costó 63.480 votos.
No hay igualdad y no todos los votos tienen el mismo valor. Hay votos que tienen privilegios sobre otros, esto para mi, es una vergüenza. Y si, es clasismo. ¿Porque mi voto tuvo menos representación que el de CIU, PNV, PSOE o PP?
Un saludo.
Amigo Daniel, lo que queda claro es que hay unos "sabios" que se dedican a la interpretación de los números, parece que no saben cuando una cifra es mayor que otra.
EliminarSalud.