Cesta de pan. Salvador Dalí.
Siempre he creído que con el vientre vacío, mal discurren los
pensamientos y menos aún la poesía.
Para
tener la mente clara y obrar con sentido común, se necesita tener cubiertas las
necesidades nutricionales. Esto no quiere decir que haya uno de atiborrarse,
los excesos obnubilan el pensamiento y dificultan los movimientos.
Entre
el hambre y el atiborramiento hay un punto medio, que es la contención, en este
punto se sitúan los momentos más creativos. Esto ya lo sabían Teognis de Megara y Horacio.
Favorecen
la creatividad las comidas sencillas, que al fin y al cabo son las de lo más apetitosas y las que saben mejor. Cito algunas:
Sardinas
a la brasa. Miguel Ángel gustaba de ellas, también Josep Pla.
Spaghetti alla Pentelleria (con alcaparras). Plato
que preferían Leopardi, Giacomo Puccini y Tomasi di Lampedusa.
Pan
seco de Creta. Lo comían Nikos Kazantzakis y los tañedores de lira.
Sanfaina
o pisto con un huevo frito o cocido. Cervantes era un aficionado a este plato y
también Cesare Pavese que lo degustaba en la versión “caponata” con huevo, esto
es añadiendo unos trocitos de apio.
Pan con arengue y uva. El Barón de Maldà, Rafael
d'Amat i de Cortada, lo merendaba muy a menudo. Solía comerlo, también,
Francisco Tárrega.
Coca de recapte. Plato preferido por Enrique Granados y los poetas de las tierras interiores. Un amigo de Vic me dijo que Balmes también comía este tipo de coca, pero yo nunca he creído que esto fuese verdad.
Pan tostado untado con ajo y aceite. Jacinto
Benavente, Jovellanos y Leopoldo Alas eran muy aficionados al pan con ajo.
También lo comía Isaac Albéniz pero este lo acompañaba con una pastilla de
chocolate.
Caramba, me dejas parado, no sabía de las aficiones culinarias de estas personas, si sabía, sin embargo, que para dedicarse al pensamiento se han de tener cubiertas las necesidades primarias. Así, la mayoría de las personas que se dedicaron a la Filosofía, tenían la comida asegurada.
ResponderEliminarY es de recibo, cuando la nevera está vacía lo primero que importa es llenarla.
De Vic, el fuet.
Y el ajo lo suelo acompañar casi con todo.
Salut
Amic Miquel, con la tripa vacía, la mente sólo se ocupa en cómo conseguir llenarla, deja aparte las metafísicas y las especulaciones sobre el ser y la nada. Porque su necesidad es llenar la nada que tiene en la barriga y procurar que su ser perviva.
EliminarSalud
Unas sopas de ajo con una o dos yemas de huevo son justo aliciente para lo creativo. Un vasito de vino puede poner la guinda al pensamiento.
ResponderEliminarAmigo Fackel, una sopa de ajo es otro de los platos a añadir a la lista, también el vasito de buen vino. Estas cosas estimulan el magín.
EliminarSalud
jaja es increíble la de curiosidades que sabes! Cuesta imaginarse a Miguel Ángel comiendo sardinas, pero claro, tenía que estar en forma para subirse a aquellos tremendo andamios a pintar los frescos de la Capilla Sixtina, si cenara opíparamente la pesadez de la digestión y el sopor sería peligrosísimos en las alturas. El caso es que son platos sencillos cierto, pero algunos no sé ni lo que son ¿ qué es recapte ? y .. ¡vaya combinación la de Albéniz! pan con ajo, aceite y chocolate, así estaba de orondo, aunque su música sea tan grácil y liviana.. a mi si me dejas un cuenco con helado de chocolate -o de cualquier otro sabor menos de nata- me vale : )
ResponderEliminarUn beso recién horneado, que es como está más rico, como el pan : )
Querida María, está documentado que Miguel Ángel consumía sardinas, se encontraron unas notas donde el gran artista detallaba los gastos y en qué cosas se le iba "il denaro", en estas notas dice que había gastado tanto o cuanto en sardinas. Las sardinas no son indigestas, Josep Pla dice que en un buen desayuno en la playa se pueden consumir tres docenas de sardinas a la brasa por barba, sardinas recién pescadas.
EliminarLa coca de recapte es una especie de pizza sin queso; sobre la masa se disponen pimientos asados, berenjenas, un arengue, tomate, alguna hierba aromática y todo se coloca al horno. Según el lugar o el cocinero encontramos otras variedades, todo muy vulgar y nutritivo como debe ser.
He probado el pan con aceite, ajo y chocolate como lo tomaba Albéniz y te aseguro que es una delicia, no me extraña que el músico compusiera su extraordinaria obra para piano bajo los efectos de tan exquisito manjar.
Abrazos mil.
Buenos días:
ResponderEliminarNunca mejor dicho que de la panza sale la danza; a mi una buena sanfaina me encanta y la verdad, salvo que tenga que ir a alguna reunión, el pan con ajo y aceite de oliva...por aquello de no anestesiar al prójimo. No soy de mucho embutido, pero como dice Miquel un buen fuet es "bocato di cardinale".
Hay que comer variado y con cantidades pequeñas, según los expertos, cinco veces mejor que en tres .
Totalmente de acuerdo: comer para nutrirse los atiborramientos dan mucha modorra y si son acompañados del liquido etílico aún mas.
Una buena entrada para comenzar el día:)
Un abrazo
Querida Bertha, con la panza vacía ni se baila ni se canta ninguna pavana.
EliminarLa sanfaina es un monumento, a mí me gusta el ajo y que repita.
No entro en cuestiones dietéticas, no sé nada de estas cosas, sólo sé que hay que comer sano, no demasiado y muy variado.
Un fuerte abrazo
Las sardinas, en todas sus facetas, pero a la brasa cantan mucho, en arenque por la sal imposible, así que las tomo de lata en aceite de oliva, necesito las vitaminas D y E, para el buen funcionamiento sexual
ResponderEliminarEl pisto y las migas, como las del parador de Manzanares, en ningún sitio.
Creía, que para la poesía, el sentimiento, la música, lo ideal sería el estómago vacío, que es cuando se sufre.
Saludos.
Amigo Car res, los platos que he puesto en la lista se caracterizan por su exquisita vulgaridad, son platos que se han transmitido de generación a generación, a unos nos gustan unas determinadas elaboraciones más que otras o que algunos ingredientes nos sientan mejor o peor. Soy incapaz de dar consejos dietéticos y sobre todo en las cuestiones nutricionales.
EliminarCuando uno está con la panza vacía sólo piensa en cómo llenarla y se deja de especulaciones filosóficas o artísticas. También está claro que los excesos son improductivos y hoy vemos un panorama de estómagos abundantemente saciados.
Saludos
Me gustan y he probado todos, y alguno de ellos lo sigo tomando muy habitualmente. Me refiero al que refieres que eran tan aficionados Benavente, Jovellanos y Clarín. Bueno he probado todos salvo el pan con aceite, ajo y ¡chocolate! de Albéniz y el pan seco de Creta (aquel de un día inolvidable para ti junto a iglesia de Panagia Kerá). Manjares sencillos siempre.
ResponderEliminarEn esto estoy con Josep Pla. En "El meu país" escribía: «Davant la cuina, doncs, soc un tradicionalista recalcitrant, un conservador aferrissat. No aspiro a contribuir a cap revolució culinària, sinó tot el contrari: a salvar tot el que sigui salvable». Pues yo, igual que Pla. Y en otro lugar escribía también algo con lo que estoy plenamente de acuerdo: «La cuina com a art de lentitud, de paciència, de moderació, de calma, ha passat avall. Ara es vol fer una cuina anomenada 'revolucionària'. Vagin entrant, si volen, en la cuina revolucionària i cada dia menjaran més malament».
Un abrazo.
Amigo GranUribe, estoy casi convencido de que el pan con aceite, ajo y chocolate te gustaría.
EliminarLas palabras de Josep Pla son de antología. Es recomendable su libro "el que hem menjat" (XXII de su obra completa)
Salud.
Confieso sin pudor que me inclino por un par de huevos fritos acompañados de chorizo, jijas o morcilla... Suficiente para muchas horas.
ResponderEliminarUn buen desayuno, supongo que este plato proporciona una buena energía para salir a pasear.
EliminarBuen provecho.