AsíntotaMe angustia la asíntota.
Siempre va acercándose
hasta el infinito.
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Los ataúdesLos ataúdes son poliedros irregulares.
Se adaptan a nuestro cuerpo.
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Es angustioso descubrir que el infinito tiene un final y que nustros cuerpos se amoldan a la muerte.
ResponderEliminarUn saludo.
Las asíntotas, querida Siroco, dan miedo, no tienen fin, atraviesan mistrales y sirocos, pueden llegar más allá de los puntos cardinales, penetran hasta el tuétano con la precisión del frío, pueden incluso llegar a detener el empuje de un soneto y continuan su trazado hasta más allá de las estrellas coloradas. Dan mucho miedo las asíntotas.
ResponderEliminarSalud
¡Hay tantas cosas que dan miedo...! Tus palabras a mí no me dan miedo, pero siempre me dan qué pensar.
ResponderEliminarEspero verte el día de la presentación de tu libro, Francesc. Un abrazo.
En el caso de encontrarse uno con una asíntota es mejor apartarse y dejarla pasar... ...qué miedo el infinito!
ResponderEliminarInma, te espero en Santa Mónica, hasta entonces que ninguna asíntota te alcance.
ResponderEliminarSalud
Còssima, si viene la asíntota le pegas una patada en el punto de máxima curvatura y te largas corriendo, se quedará tocada y lo más probable es que no le queden ganas de continuar hasta el infinito, también puedes torcerle el eje de aproximación y así la despistas.
ResponderEliminarDe todas maneras qué miedo el infinito.
Salut guapita