Desde el primer Renacimiento, en el trecento de Petrarca y Dante, y hasta finales del cinquecento, en pleno antropocentrismo humanista, circuló un debate sobre la petrificación de la vida y la humanización de las rocas. Fueron disquisiciones muy fructíferas desde el punto de vista artístico.
Los humanistas contemplaban las esculturas greco-romanas y querían ver el origen de la humanidad en los mármoles.
La piedra es inerte, pero esta cualidad no parecía interesar a los renacentistas, ellos se empeñaban en la búsqueda de una sustancia vital en el interior de las rocas calcáreas y de los mármoles.
Miguel Ángel afirmó que su David ya estaba en el interior del bloque de mármol y que él, como escultor, no hizo más que eliminar los trozos de piedra que sobraban y que envolvían aquella figura tan maravillosa, con venas y músculos de mármol.
David -detalle vena yugular- Miguel Ángel Buonarroti
Mi queridísima Còssima dice que Miguel Ángel era un "pela-piedras" -¡hija mía, cuánta razón tienes-, el Buonarroti pelaba el bloque de mármol como si la piedra fuera un "persico".
La Pietà -detalle de la mano y el brazo-. Miguel Ángel Buonarroti
Me sigue pareciendo imposible sacar esto en piedra, lo veo y no lo creo. Siempre me pregunto como lo harían. Es belleza pura y personalmente pienso que esto es una de las razones que nos separan de los animales. Otro gran creador fue Bernini, parecen personas que hubiesen quedado "paralizadas" para siempre.
ResponderEliminarSon hermosos.
Un saludo.
Amigo Daniel, esto es un prodigio. Este arte justifica la existencia de una civilización.
EliminarBernini, extraordinario y Donatello, Verrochio, Ghiberti, Pisano, Berruguete... unas maravillas que parecen imposibles.
Salud
¡Pero qué bien peló las piedras el tal Michelangelo! Hasta influyó en otros pela piedras o pela maderas, como Alonso Berruguete.
ResponderEliminarAmigo Fackel, piedras peladas que son un prodigio de la mente humana.
EliminarBerruguete es magnífico, se suma a la lista de los más grandes.
Abrazos
Qué maravillosa vida dio Miguel Ángel y todos los grandes del renacimiento a esos bloques inertes de mármol ...tiene razón DANIEL, son esculturas tan absolutamente perfectas, con tal nivel de detalle y precisión q no parece posible q un simple humano haya sido capaz de hacer algo semejante ...a lo mejor eran semidioses ; )
ResponderEliminarMil gracias FRANCESC , un muy feliz día y un beso grande ...para ti y..tb, para tu hija .. qué nombre tan bonito !!
Querida María, son obras extraordinarias, parece casi imposible que las hay podido esculpir un ser humano, parecen divinas.
EliminarMaría, en mi familia abundan los Cosme, yo mismo me llamo Francisco Cosme Jaime, y mi hija, según la tradición familiar, le correspondió el femenino de Cosme (Cósima en castellano y Còssima en catalán).
Abrazos mil
Es increíble como conseguía esta perfección, esta belleza, esto es Arte...
ResponderEliminarAbrazo
Amiga Milena, es una perfección insuperable, cuando ves esto te quedas patidifuso. Es una maravilla.
EliminarAbrazos
A mí , lo de
ResponderEliminarCinquecento,
me sonaba de
un modelo de
Fiat , pero bueno...
que grandes los
artistas de entonces.
Amigo Orlando, yo creo que el arte del Renacimiento recuperó las cotas de la belleza del arte greco-romano. Alcanzó las más altas cotas del arte.
EliminarSalud
Las piedras Trovants de Rumanía se han convertido en un enorme atractivo para turistas y científicos que las han apodado como "las piedras vivas"
ResponderEliminarSaludos cordiales
Amigo Luis Antonio, las piedras Trovants son un misterio, es algo rarísimo.
EliminarSaludos
Coincido con Cóssima y me alegro porqué mi nonna paterna también se llamaba Cóssima.
ResponderEliminarEs impresionante esta escultura , darse un paseo por Florencia es un atraco de arte y otra escultura de estilo severo entre la arcaica y la clásica es la Auriga de Delfos me quedé impresionadísima de esta escultura nos remontamos 475 a.C. esta es en bronce :pero es una escultura que rompe con la concepción del frontalismo.
Un abrazo
Querida Bertha, en mi familia es habitual el nombre de Cosme, y en femenino Cósima en castellano y Còssima en catalán.
EliminarEn Florencia encontramos prodigios como estos mármoles perfectos que parece que estén vivos. Son una belleza ideal, magnífica.
Me hablas del Auriga de Delfos, es un bronce extraordinario del estilo "severo" impresiona, para mí es como si fuera la personificación del dórico.
Un gran abrazo.
También a mi me parece imposible que de un trozo de piedra pueda sacarse tamaña belleza.
ResponderEliminarHay obras que son, a mí me lo parece, insisto, imposibles de ejecutar, y, sin embargo, ahí están.
Un beso a Cossima.
salut
Sí Miquel, parece imposible que se puedan pelar bloques de mármol con tantísima perfección. Es una maravilla, cuando lo ves, queda una marca indeleble en tu mente.
EliminarSe lo transmito a Còssima.
Salud
Francesc:
ResponderEliminarpor mucho que estuviese David dentro de la roca, sólo Miguel Ángel fue capaz de "sacarlo".
Salu2.
Amigo Dyhego, muy pocos artistas has sabido dar vida a los mármoles tal como lo hizo el gran Miguel Ángel. Es impresionante, pare obra de los dioses.
EliminarSalud
Lo de Miguel Ángel está más que . Pero, por culpa de felicitar a Herr Uribe, Google no nos ha recordado que hoy también fue el "cumple" de otro personaje, quizás un punto más importante que este modestísimo bloguero... En fin, que Dios bendiga también a Gian Lorenzo Bernini (Nápoles, 7 de diciembre de 1598-Roma, 28 de noviembre de 1680).
ResponderEliminarhttps://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg7_8jAASISOYgjPm3MN2O_63QpStQa_rb6r2nIj5GMWqdHhp5O87DFbZIL4dXQEDL5kmbp85QSpxR1-dA8uz6YMA7KsIdmMT-jLTBSIDCSCuikhXj6jBY75c207mlIlGzm3v7S6Dgx6t2t/s1600/bernini_1.jpg
En fin, ambos dos Miguel Ángel y Bernini, son el no va más, en mi modesta opinión.
Un abrazo (que comprenda también a Còssima, la del "pela-piedras", muy bien hallada la palabra).
Sí, sí, sí; se nos ha olvidado felicitar a Gian Lorenzo Bernini como se entere este gran signor y gran artista, no dejará petrificados a golpe de cincel.
EliminarAmigo Gran Uribe, Còssima tiene un buen sentido del humor tremendo y una capacidad de simplificar que te petrifica.
Salud.