jueves, 30 de abril de 2020

El Modernisme, el Art Nouveau y otros compañeros extraviados


Puerta del Pabellón Güell. Arquitecto A. Gaudí

Fue Art Nouveau en los países galos, Modern Style entre los anglosajones, Jungendstil en las tierras germánicas, Nieuwe Kunsten en los Países Bajos, Sezession en la Viena imperial, Liberty en Italia, Modernisme en Cataluña que luego se extendió por España en las diversas formas de modernismo como el melillense, el madrileño, el valenciano o el alcoyano.

Todas fueron manifestaciones de un romanticismo tardío, de un decorativismo con tintes nacionalistas, algunos de ellos fundamentalistas sospechosos.

Aquellos modernistas creían romper con el pasado y decían “el futuro ya ha comenzado”, pero, se caracterizaban por mirar hacia atrás, unas veces hacia remotas mitologías y otras veces su mirada pueril y plácida se extendía sobre la Edad Media. Pero lo sorprendente es que además miraban hacia otro lado. Era una mirada extraviada.

No se trataba sólo de buscar una inspiración en tiempos pasados, sino que además la buscaban en lugares alejados.

Así, por ejemplo, encontramos que las fuentes de inspiración del modernisme se sitúan en la Edad Media y buscan modelos imaginarios entre las brumas del norte. Les gustan los dragones y los dioses escandinavos.

Los espíritus modernistas de Barcelona se encandilaban con la mitología wagneriana. Se entusiasmaban con las leyendas artúricas y la Materia de Bretaña.

Estos románticos nacionalistas, andaban perdidos en el tiempo y en el espacio. Su mirada extraviada se complacía con las princesitas pálidas y con las frías nieblas septentrionales.

Portal (Dresden). Arquitecto Friedrich Wilhelm Hertzch

Sus compañeros decorativistas, de la Sezession vienesa o los del Jungendsil bávaro también andaban con la mirada extraviada. Ellos eran del norte y contemplaban el sur. El remoto sur, donde el sol abrasa la Puerta de los Leones. Miraban hacia Micenas y hacia Creta.
En la decoración germana de la Sezession y del Jungendstil, en el diseño de carteles y en la cerámica, hallamos una abundante iconografía cretense: toros estilizados, dioses azules, pulpos del Paleocastro, delfines, efebos con cintura de avispa, peces negros, cascos con plumas y esvásticas sospechosamente precursoras.

Aquellos modernistas germanos copiaban la indumentaria de las diosas de Cnosos, los vasos de Kamares. En Viena y en Múnich decoraban oficinas bancarias con columnas lacadas en rojo y oro. Aquello parecía un palacio minoico redivivo.

En las fiestas de disfraces de Renania y en los Kunsttheater rememoraban al famoso Príncipe de los Lirios de Cnosos luciendo el penacho de plumas, las diosas de las serpientes y las damas de azul.
El príncipe de los lírios. Cnossos -Creta-

Esta “cretomanía” duró hasta 1914 cuando ya había comenzado la Gran Guerra. 

La Primera Guerra Mundial se llevó por delante modernismos y toda clase de romanticismos tardíos.

 Idylle. Gustav Klimt

Aparecieron otros estilos artísticos renovados que se encargaron de expresar el dolor y la barbarie del siglo XX. Algunos de estos estilos se dedicaron a exaltar los regímenes totalitarios que más tarde dieron lugar a la otra gran conflagración, la Segunda Guerrra Mundial.

Aquí, el diseño y la efervescencia modernista también se fue abandonando. Las señoras modernistas del l’Eixample de Barcelona fueron sustituyendo sus joyas de Masriera por colgajos y broches Art Decó y posteriormente Noucentista.

8 comentarios:

  1. Gracias, Francesc, por tus explicaciones.

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    1. Amiga Viky, es solo un apunte sobre un estilo muy controvertido.
      Saludos

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  2. ¿Porqué duró tan poco el Art Decó? y porque tuvo cierto éxito en la arquitectura americana, y no lo tuvo el Modernismo?.
    Un abrazo

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    1. Miquel el Art Decó era una de las manifestaciones de un romanticismo que ya se acababa, fue sustituido por las vanguardias del siglo XX.
      Su presencia en la arquitectura americana (Nueva York, Buenos Aires, Chicago, Sao Paulo...) se debe a la obra de algunos arquitectos seguidores, en cierto modo, de la Escuela de Chicago e influenciados por el cubismo, el futurismo o el constructuvismo. También encontramos Art Decó en Saigón y en Belgrado.
      Abrazos

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  3. Muy interesante e instructivo.
    Gracias y salud.

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    1. Amiga Isabel celebro que te haya interesado. Pretendía solo un breve apunte.
      Salud

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  4. Echar la vista atrás y sentir nostalgia del pasado es común entre románticos, modernistas y nacionalistas trasnochados. Lo malo es cuando trasciende lo puramente estético y se convierte en doctrina.
    Un saludo.

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    1. Sí,Cayetano, sí y absolutamente sí. Muchos viven anclados en aquel pasado que a su vez miraba al pasado y esto trasciende y acaba convirtiéndose en un fanatismo peligrosísimo.
      Abrazos

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