Cuanto más se parece Haydn a Händel, menos me gusta. Aquellos timbales anglicanos parecen contener todas las cosas necesarias para la salvación del mundo, son unitaristas -a la ecclesiastical polity manera de Richard Hooker-
Que conste que tanto a Haydn como a Händel los tengo en un pedestal, pero cada uno con lo suyo: Haydn con su clasicismo y Händel con su barroco. Los admiro, sí, absolutamente sí.
Joseph Haydn (1732-1809) podía correr toda clase de riesgos compositivos, su mente era clásica, capaz de experimentar, ampliar, mejorar..., un extraordinario compositor, al que probablemente le afectaron las neblinas londinenses y se dejó seducir por el hilo discursivo y precioso de los oratorios barrocos del gran Georg Friedrich Händel (1685-1759).
Me ha resultado un descubrimiento eso de que las nieblas no solo enturbien las líneas rectas del edificio, volviéndolas curvas en apariencia, sino también las de la clásica razón compositiva.
ResponderEliminarUn abrazo.
Amigo Julio, casi siempre, las nieblas nos juegan malas pasadas.
EliminarAfectan a los compositores, me lo comentaba una amiga conocida compositora.
Abrazos.
Entre grandes, ¿por qué elegir?
ResponderEliminarNo, Pedro, no elegiremos, nos quedaremos con todos los grandes.
EliminarSalud.
Bueno, hoy nos "perdonas la vida" y no hablas de esos músicos contemporáneos que tanto te atraen y tanto desconozco (nunca me he metido en ello, me cuesta mucho). Hoy nos hablas de dos de mis músicos preferidos, y lo agradezco. Me gusta casi todo lo que hicieron, tanto Händel como Haydn, séase en Londres, en Hamburgo, en Italia, en Viena, en Esterháza, o donde fuere, me da igual, aunque con una producción tan amplia siempre hay cosas más flojitas. Fueron dos monstruos (sin olvidar a Bach, Mozart, Beethoven, Schubert, que también).
ResponderEliminarPero puestos a escoger:
—de Händel me quedo con los Concerti grossi, op. 6 y con todo el Mesías.
—de Haydn, aunque tiene conciertos muy hermosos, me quedo con sus sínfonías de Londres y varios cuartetos (verbigracia, el "Emperador", 76 nº 3). Por ejemplo, la "Sinfonía del Reloj" (nº 101) me gusta mucho, especialmente el 2º movimiento (8:42), claro, aunque también el 4º (23:53).
https://youtu.be/sm4eBMgtdT0?si=3wvFNj1wcK7YFXVs&t=522
En fin, a cada uno le gusta lo que le gusta, le disgusta lo que le disgusta y le es indiferente lo que le es indiferente. Ciencia pura.
En cuanto a la composición de timbaleros y trompeteros de cerámica valenciana, me gusta también mucho (hablando de timbales, también la Sinfonía "Golpe de Timbal", nº 103, y hablando de trompetas, me quedo con la trompeta barroca, que tan bien utilizaba Händel).
Te dejo. Me dispongo a guisar un conejo al vino tinto (con romero, naturalmente), que me suele quedar bastante bien.
Un abrazo
Amigo Gran Uribe, has escogido una buena selección. Händel y Haydn son unos auténticos faros que iluminan la civilización europea.
EliminarQué vaya bien el guiso y luego la degustación. Seguro que será un placer. Buen provecho.
Salud.
Bueno, a mi no me toca más que buscarlos en el Spotify este, que me los encuentra en un santiamen, así que gracias por las recomendaciones y a escuchar se ha dicho.
ResponderEliminarSalut
Amic Miquel, nuestro amigo Gran Uribe, nos ha dejado unos buenos ejemplos de obras de Händel y de Haydn, son composiciones muy buenas, absolutamente recomendables.
EliminarAbrazos.
Hola Francesc, siempre me han llamado la atención los azulejos de cerámica artesanales, en este caso he visto que la imagen pertenece a un museo, así que tiene que ser algo digno de ver.
ResponderEliminarHay influencias que pueden ser fatales, qué curioso lo de la niebla, supongo que afecta al estado anímico del compositor y acaba trasladándose a su obra.
Te mando un abrazo.
Querida Ana, estos azulejos pertenecen al "Plafó dels timbalers de València", son del siglo XVIII, está en el Museu de Ceràmica de València.
EliminarEstoy convencido que la climatología afecta al compositor y a todos lo artistas, son personas sensibles y creo que cualquier vientecito, cambios bruscos de temperatura o de humedad, les afecta. Es lógico que un cielo claro y azul, determine la inspiración o la creatividad de un artista de forma distinta que a otro le puede afectar un día gris medio nubloso o con nieblas crepusculares.
Abrazos.
Francesc:
ResponderEliminarcomo no tengo ni idea, paso, leo y te saludo.
Salu2.
Amigo Dyhego, agradezco mucho tus visitas y tus comentarios.
EliminarSalud