El paso de los equinoccios
ha mudado toda forma.
Las geologías más solidas
devienen áridos y los cuerpos
se transforman.
Quisimos lo inmenso
y éramos anónimos en la inmensidad
de los virus y las galaxias.
Luchábamos contra aquello que creíamos
enorme y que era tan pequeño como
nuestra pequeñez.
Parecíamos enemigos de un mismo dios,
levantábamos la espada de la palabra
y de la razón envanecida
y no sabíamos hacia dónde las levantábamos.
Hoy contemplo las constelaciones
con sus caminos lácteos y me conformo
con la estricta dependencia de la materia
y aborrezco la voz del ángel desaparecido
cuyas palabras nos condenaron
a una existencia que añora eternidad.
F.C. (mayo 2017)
Todo el poema me gusta. La cuarta estrofa me parece genial.
ResponderEliminarGracias Viky, celebro que te haya gustado.
EliminarCon el poema intento relativizar todo lo que puedo.
Saludos
"condenados a una existencia que añora eternidad" si que es una pena, gracias por tus letras.
ResponderEliminarGracias a ti, amigo Xan, por leer estos versos.
EliminarSalud
Vivir es un constante alzar una torre de babel, acaso para no llegar a ninguna parte, aunque admitiendo su utilidad para los días que se nos conceden. Aferrémonos a los pasos constructivos que los humanos han ido dando. Por sí mismo se justifican. Lo demás es sofisma.
ResponderEliminarAmigo Fackel, vamos levantando la torre de Babel y las lenguas se confunden, nadie parece entenderse.
EliminarHay construcciones humanas que justifican toda una civilización. Me aferro a Beethoven, a Dante, a Miguel Ángel, Cervantes, Velázquez...
Abrazos
La le he leído dos veces.
ResponderEliminarLa primera vez me gustó; me conmovió la segunda.
Salut
Gracias Miquel, es un poema en tiempos de confinamiento.
EliminarAbrazos
Esa es la fatalidad de la condición humana: luchar contra lo desconocido, contra la adversidad, sin saber muy bien dónde se esconde. A veces todo se queda en dar golpes en el aire.
ResponderEliminarUn saludo.
Sí, Cayetano, esta es una de las múltiples fatalidades del ser humano.
EliminarEn gran medida el aprendizaje depende de la lucha por sortear las adversidades.
Salud
Leo esto:
ResponderEliminar"Hoy contemplo las constelaciones
con sus caminos lácteos y me conformo
con la estricta dependencia de la materia
y aborrezco la voz del ángel desaparecido
cuyas palabras nos condenaron
a una existencia que añora eternidad."
Y me pongo a pensar...me ha gustado...
Un saludo
Amigo Daniel, el poema es una ligera reflexión.
EliminarSalud
Hemos llenado las palabras de espadas. Buen poema.
ResponderEliminarEspadas afiladas.
EliminarSaludos
Hermoso poema.
ResponderEliminarAbrazo.
Gracias Andri. Eres una fiel seguidora, agradezco mucho tus comentarios.
EliminarAbrazos