He asistido a una de las actividades que se han celebrado en el marco de la “Biennal de pensament” Barcelona 2022. Antes de empezar me han presentado a una de las arquitectas que formaban parte de una mesa redonda en la que se debatía sobre las nuevas formas de concebir el urbanismo bajo una mirada de género y participación ciudadana.
En el debate se aducían argumentos que me incomodaban -me removía en mi silla- y otros argumentos y propuestas de un urbanismo ilusionado que discurrían entre la inexperiencia y lo naïf y que a pesar de ello, pueden suponer un avance en la manera de entender el urbanismo como una disciplina participativa.
Me ha gustado la argumentación de Atxu Amman y aplaudo su enfoque sobre la construcción de la ciudad.
A pesar del frío -el acto se celebraba al aire libre-, Amman ha hecho que me sintiera cómodo en la silla y olvidara aquellos versos de Salvador Espriu que rezan así:
tots patim, les cadires són coixes
i els llistons se’ns claven a l’esquena.
todos sufrimos, las sillas son cojas
y los listones se nos clavan en la espalda.
jajajajaja......mira por donde me sales.
ResponderEliminarMe gusta tu humor inglés.
Cuidate¡¡¡
¡Ah, qué gracia! Miquel, yo creo que mi humor no tiene nada que ver con aquellos británicos que viven en la neblina pertetua. Mi humor es de cuadrícula de l'Eixample.
EliminarSalud
Si los diseños nacen de una reflexión en la que se pone en primer lugar al ser humano, el mundo su tiempo, bienvenidos sean. Ay de aquellos que nacen solo de la imaginación disparatada de quien los perpetra.
ResponderEliminarAmigo Pedro, el diseño, como la arquitectura y el urbanismo han de estar al servicio de los hombres y mujeres que habitamos en este mundo, si no es así, son un puro entretenimiento inútil que solo obedece a la vanidad del diseñador.
EliminarMenos mal que Amman hizo que tu silla no se pareciera en nada a la de la foto, un autentico instrumento de tortura jajajaja. Me llamó la atención lo de la mirada de género ¿quieres decir que había una mesa en la que solo participaban mujeres?
ResponderEliminarMe vuelvo a reír pensando en la imagen mientras leo lo de sillas cojas o listones incómodos en la espalda, pequeñeces al lado de poner las posaderas en semejante asiento, qué barbaridad!!!
Un abrazo Francesc!!!
Querida Ana. Los argumentos de Amman parecían más sólidos, digamos que eran como una silla con las patas en el suelo y manteniendo el equilibrio. Todo lo demás resultaba bastante inocentón.
EliminarHabía en la mesa cinco mujeres y un hombre que hablaba en femenino.
Un abrazo.
Recuerdo que en mi infancia el culo de las sillas se acababa rompiendo. Era una señal, además de un efecto físico (por su deficiente calidad, por no soportar a los gordos o a los niños saltarines)
ResponderEliminarEl uso y el tiempo acaba con todo, hasta con los culos más resistentes.
EliminarSalud
Tengo la sensación que vivimos en un tiempo disparatado, Francesc, donde el equilibrio precisamente es escaso, y hay mucho postureo y frases de tertulia de café que se incorporan sin más a reflexiones tan serias como es el Urbanismo...
ResponderEliminarLa silla que ilustra este post sería uno de esos "argumentos emocionales" que nada tienen que ver con la función de una silla, que puede ser bella y capaz de hacernos sentir cómodos, o una pieza para "adornar" o sorprender.
En cuanto al urbanismo de género... No me parece un criterio sin más.
Aunque te confesaré que en los parques infantiles siempre que percibo algo inútil y hasta peligroso para que los niños disfruten pienso "esto seguro que lo ha diseñado un hombre" Ya, no es muy correcto, pero es cierto que me ocurre.
Muy interesantes siempre tus posts.
Un abrazo,
Amiga Tesa, muy a menudo me encuentro personas que exponen sus argumentos de forma panfletaria, un conjunto de frases extraídas de alguna pancarta. Hablan y repiten consignas que no son más que unas reflexiones pueriles o de alguien que no conoce la existencia de experiencias que fracasaron.
EliminarEl Urbanismo es una disciplina que requiere mucha seriedad y, en su diseño y planificación, debemos evitar los estados emocionales y las consignas panfletarias.
Abrazos
Tienes mérito acudiendo a ese tipo de actos. desafiando al relente otoñal vespertino, aunque mejor fuera que en un interior. Creo que me hubiera sentido un poco incómodo en la silla (tengo problemas de eczemas en "salva sea la parte", hemorroides y dolores lumbare persistentes. Si fuera la de la imagen... ni te cuento.
ResponderEliminarSupongo que en esa mesa redonda quedaría claramente expuesto lo que es eso del urbanismo visto desde una perspectiva de género. Yo sigo sin saberlo. En cuanto a Atxu Amann, desconozco sus teorías urbanísticas, aunque sí he estado en el Museo-Centro de visitantes de Monteagudo (Murcia), soy un habitual de esas tierras. Un contenidor apabullante (el museo, con superabundancia de acero cortén, en un conjunto casi mayor que el pueblo), con un contenido casi inexistente, quizá ahora lo hayan llenado un poco más.
Amigo GranUribe, iba cayendo la tarde y los argumentos de las tertulianas eran difíciles de digerir, todo junto resultaba más incómodo que la silla.
EliminarMe doy cuenta que cuando hablan de urbanismo de género todo adquiere un matiz de domesticidad que elude la enorme complejidad que tiene esta disciplina. Complicado, amigo mío.
No conozco la obra de Amman, sólo he conocido sus argumentos en esta mesa redonda, me parecieron algo más sensato que los vertidos por el resto de tertulianos.
Salud.