Cinco palabras en green neon (1965). Joseph Kosuth
El esfuerzo de los que se dedican a la comunicación y a la publicidad va dirigido, principalmente, a buscar un titular corto. Interesan los titulares. Y me parece que por este camino también circula la literatura actual.
Hoy los textos se reducen a la dimensión de un whatsapp.
La literatura que hoy se publica evita las frases largas y la riqueza en la adjetivación; los contenidos son bastante simples y esto, que podría parecer una simplificación positiva, lo califico de una simpleza negativa.
Veo que una verborrea retórica y un exceso de palabrería envuelven unos argumentos escasos y simplones. Mucho ruido y pocas nueces.
Las ideas están suministradas en dosis homeopáticas. Es decir en bolitas de verborrea azucarada que contienen unas dosis infinitesimales de idea o argumento.
Ya se ha demostrado que la homeopatía sólo sirve de entretenimiento para esotéricos y que no tiene ningún efecto, ni bueno ni malo, es algo insustancial.
Va en el sino de los tiempos, Francesc. El argumento se utiliza poco, las ideas vienen cocinadas, el pensar se hace gandul, y lo fácil es lo que ya viene digerido en Tik Tok.
ResponderEliminarSalut
Sí, Miquel, es el signo de los tiempos.
EliminarAlgunos se dedican a la cocina del calabacín y otros a manipular y cocinar ideas y acaban dejándolas requemadas.
Salud.
Reconozco que las facultades merman, me pierdo en guioneslargos
ResponderEliminarCar res, el tiempo va pasando y va dejando señales.
EliminarSaludos.
Hay pocas ideas, están suministradas en doses homeopáticas y están mal escritas. Eso es lo que predomina ahora. Y dentro de los famosos "setecientos años"... ya veremos si queda alguna.
ResponderEliminarQué difícil es escribir bien y mira que lo intento. Se me ocurren algunas cosas:
—Aunque son útiles, me molestan un poco las "asociaciones parasitarias" de palabras, esas que parece que han de ir juntas siempre. Son muy usuales en la prensa: Animada conversación, Apretada agenda, Aplastante mayoría, Ascenso fulgurante, Baño de multitudes, Bochornoso espectáculo, Descanso reparador, Dominio abrumador, Dimisión irrevocable, Denodado esfuerzo, Escena dantesca, Facilidad pasmosa, Largo y tendido, Un largo etcétera, Marco incomparable, Precio astronómico, Rabiosa actualidad, etc.
—La buena adjetivación es clave y creo que distingue un buen texto de uno malo. Los adjetivos, como los amigos, es mejor que sean "pocos y bien escogidos". No me suele gustar cuando se abusa de ellos y cuando se anteponen al nombre, algo muy habitual.
—Y el uso de la coma, ¡qué difícil es! Yo creo que lo mejor es: "pocas pero bien puestas". No siempre es fácil. Por ejemplo, su empleo innecesario da lugar a textos muy trabados (hay quien adapta las comas del texto a su ritmo de respiración al hablar). Y la falta de la coma cuando es necesaria da lugar a ambigüedades que dificultan mucho la interpretación del escrito.
Etc. ("Un largo etcétera", por cierto).
Un abrazo
Amigo Gran Uribe, hay una enorme verborrea que envuelve pequeñas insignificancias que muchas veces no son nada. Estamos hartos de tanta charlatanería. Esas "asociaciones parasitarias" que citas se van soltando sin pensar y se repiten como coletillas.
EliminarAdjetivar con precisión es muy difícil, estoy por asegurar que sólo se consigue cuando hay una buena idea y una claridad de pensamiento.
La puntuación, las preposiciones, el uso adecuado de los tiempos verbales, etc. y sobre todo resolver la ecuación: sujeto+verbo+predicado=rigor.
Un abrazo.
Te felicito por esta entrada tan pedagógica y llena de conocimiento. Tomo nota de todo lo que expresas.
ResponderEliminarSaludos cordiales
Amigo Luis Antonio, muchas gracias, sé muy poco de pedagogía, me limito a expresar lo que más o menos voy viendo.
EliminarAbrazos.
jajaja qué buena comparación ! efectivamente creo q hoy usamos comunicación homeopática, sin sustancia y muy poco o ningún cuidado formal , supongo que porque como la homeopatía la comunicación es un meto placebo que lejos de informar veradmente o ilustrarnos habiéndonos disfrutar, únicamente busca llamar la atención y entretener, fin...no cura nada , sólo nos distrae del dolor y así parece q ya no duele : )
ResponderEliminarUn beso y muy feliz finde FRANCESC!
Querida María, los argumentos y las ideas que nos ofrece gran parte de la literatura actual, tiene muy poca sustancia. Lo que querido comparar a las bolitas azucaradas de la homeopatía que dicen contener alguna sustancia en dosis infinitesimales, puros placebos para ir pasando el rato y después comentarlo con los amigos.
EliminarAbrazos mil