En un territorio cuyas coordenadas geográficas conocemos muy bien, habita una gente que prospera fabricando embutidos. Es gente eclesial, de convicciones dogmáticas que tienen de sí misma un concepto muy positivo -hasta cierto punto petulante- que hace que se crean ser más que los demás.
No son más salvajes ni más feroces que sus vecinos, pero sí más intolerantes.
Aunque huelen a mondongo, son civilizados, no portan dagas afiladas ni garrotes, pero claman "bon cop de falç".
Visten de forma sencilla, sin lujos ni ostentación y, sin embargo, su porte es ahuecado y ufano, pues creen que su tierra es la más ufana que existe bajo la capa del sol.
Son como los
ResponderEliminarcosacos del
otro día, solo
que estos
practican
el victimismo,
que si España
nos roba, y
otras lindezas,
en mi tierra ,
la palabra
chorizo, se
utiliza más
para llamarle
zoquete a
alguien, que
llamarle ladrón,
no me extraña
lo de los
embutidos
entonces .
Amigo Orlando, hay gentes que se creen que la manipulación del mondongo les faculta para exigir un trato preferencial.
EliminarOtros tienen el mondongo metido en su mente, son cerebros embutidos.
Salud
Y esto no es lo peor, lo peor es que hay quien come de esos embutidos creyendo que son los mejores del mundo mundial, cuando en realidad lo que ocasionan es un empacho.
ResponderEliminarSalut
Miquel, hay individuos capaces de tragar cualquier porquería, comen lo que les echen y luego despotrican y se creen superiores.
EliminarSalud
Ahora me alejo, por la grasa, no estoy para esas cosas, pero me siguen gustando. La butifarra, sigue siendo la principal de las barbacoas en casa, cuando reúno a la familia. Con buen vino y alegría. A mi me parece que es un invento catalán
ResponderEliminarSaludos
Amigo Car res, la butifarra es un gran invento.
EliminarSalud
El mondongo me ha llevado a rememorar ese ritual que seguía al matacerdo. Los críos estirábamos del rabo mientras el matarife llevaba a cabo su "faena" sangrienta y festiva...Saludos cordiales
ResponderEliminarAmigo Luis Antonio, yo también asistí de pequeño a una matanza de cerdo, me parece recordar que antes de descuartizarlo lo churruscaban un poquito con tomillo, quemaban los pelos con unos manojos de tomillo encendido.
EliminarSaludos.