jueves, 14 de junio de 2018

Hopper y Lucio Fontana

 

Hopper (1882-1967) representa la inmediatez, pero llega tarde a los sitios.  

Esta paradoja otorga a sus pinturas el halo misterioso que caracteriza su obra. Sus figuras parecen suspendidas en el aire.

Un aire suspendido es un movimiento que fue pero que se ha paralizado. La instantánea dejó en el espacio una señal impresa que el pintor americano interpreta con eficacia.

La acción humana deja señales que sancionan el espacio, que quedan grabadas en el estrato de la historia y que, con la renovación de la materia, se desvanecen.
 

La eficacia de Hopper es evidente pero muerta, como murió la imagen evanescente que desapareció.


En Hopper la pintura nace después de la acción, al contrario de lo que acontece con Lucio Fontana (1899 -1968) cuya obra nace con la acción.



En este sentido, quizás la obra de Lucio Fontana supera el tiempo, deja una señal para la memoria, se produce en el momento de la acción y muere con ella. Cuando Fontana rasga una tela expresa un presente que grita y permanece.


8 comentarios:

  1. E primero me produce un halo de misterio. Sus colores tenues y sus escenas tranquilas.
    En cuanto al segundo, mi impresión es diferente, encuentro su obra más visceral y contestataria, más, ¿cómo diría?, más "guerrera".
    No se si me explico.
    Un abrazo

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    1. Querido Miquel, te explicas perfectamente. Hopper, para mí, es más misterioso que tranquilo, sus personajes me inquietan.
      Lucio Fontana es un artista que fija el gesto, su obra -importantísima- es la señal de una acción, un deimon que se apodera de la mano del artista para expresar la trascendencia del "homo faber"
      Salud

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  2. Siempre que contemplo una obra de Hopper me viene a la menta un tema recurrente: la soledad.
    Un abrazo, Francesc.

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    1. Querido Cayetano,a mí también me viene a la mente la soledad y también un ambiente donde el tiempo parece que se haya paralizado.
      Salud

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  3. Coincido con vosotros, pero a mí me viene algo vibrante cuando contemplo las escenas de Hooper, es como si el tiempo estuviera en suspensión como envolviendo la atmósfera. Es una sensación global, para mí, es algo que quizás al fotografiar una escena no puedes plasmar porque lo que prevalece es la figura y aquí se dan las dos cosas, la figura y el aire que la envuelve, la atmósfera que la hace interesante o misteriosa. Me gustan, transmiten...

    A Lucio Fontana no lo conozco tendría que ver más y ver sus obras de frente, cara a cara, porque me parece que requieren nuestra presencia para impactarnos..


    Un abrazo y gracias.

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    1. Querida Gemma, son artistas muy distintos, pero los dos provocan una reflexión sobre el tiempo y la acción.
      Saludos

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  4. Dos artistas que provocan emociones opuestas: la pasiva soledad de los ambientes urbanos de Hopper, y la acción rompedora de Lucio Fontana creando formas estéticas a punta de cuchillo o estiletes que rasgan la superficie limpia, pulida y colorida.

    Me ha interesado mucho esta entrada.
    Salud, Francesc.
    Un abrazo.

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    1. Querida Fanny, muy interesantes tanto Hopper como Fontana. Inacción y acción arrebatada.
      Abrazos

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