sábado, 2 de febrero de 2013

Un elogio de la locura


Al otro lado de la línea azul
se alinean sueños de centauros,
son los locos de la otra orilla.
Conocen las auroras lejanas
que se ocultan tras el muro de granito.
Sentados esperamos a los hermanos
que llegarán con tonadas disonantes.

Desde esta orilla, la iluminada,
oímos sus cantos incomprensibles
y miramos de lejos la fiesta
y hasta mañana no sabremos la razón
del loco del rigor plantado,
ni del hijo del clásico que le insultaba.

Tampoco conoceremos el arrebato
del loco del delirio auténtico,
y sentiremos una gran compasión
del loco débil y de su amante
que juntos se metían dentro de una cáscara
para protegerse del clair de lune.

Pasarán primaveras y atardeceres oscuros
hasta que los locos de solemnidad
y los padres del juicio invertido
nos traigan las locuras de invierno
o el terrible ruido del océano
y jamás sentiremos la fresca caricia del rocío.
Sin saber el motivo, nos reiremos
del orate del haba que se escondía de Pitágoras
y sentiremos una envidia rara
del loco ideal y del etrusco que escribía
sus deseos en un papel de estraza
y los escondía en los rincones de su alcoba.

Repasaremos la historia contemplando
el llanto egoísta del moro de Granada,
el retrato amarillento de Erasmo
que con rictus de disgusto
se dirigía a los locos de Rotterdam
ya a los que sufrían dolor de entendimiento
o que se habían infectado con las letras
del abecedario o con la turinella legitima.

Entonces desde lo alto del sicomoro
mediremos con gran cortesía
la mansa dimensión de la normalidad.

8 comentarios:

  1. Ko he leído dos veces. Creo que le entiendo...Me gusta. Salut

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    1. Miquel, si lo entiendes puedes acabar loco, ja,ja,ja...
      Salud

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  2. Désde lo alto del sicomoro: contemplaremos las locuras que el hombre ha dejado a lo largo de la historia...El loco debíl es el menos loco porque no hace sino amar que tambien es otro tipo de locura pero...se hace más daño así mísmo.

    Un poesía preciosa, me encanta esta oda a la locura...!

    Saludos feliz día.

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    1. Bertha, es muy probable que el mínimo de cordura que haya en este elogio de la locura esté en lo alto del sicomoro.
      Celebro que te haya gustado.
      Salud

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  3. Molt bona! tots estem una mica "locus"!
    Salud.

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  4. Inicias con un centauro, preparando el terreno al Clair de la lune, y nos dejas con un sicomoro. Un poema con mensaje encriptado y música de fondo.

    Este verano vi un sicomoro enorme y precioso, era emblema de un pueblo.
    Solo por su nombre tan evocador dan ganas de hablar de él.

    Abrazo.

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    1. Querida Amaltea, el otro día el mirabolano, ahora el sicomoro, ¿a ver si resultará que admiro más el género vegetal que el género humano? Parece una locura.
      Salud

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