Estoy convencido que los
sueños son fisuras de la razón. Creo que
tienen un efecto hipnótico y que en el fondo no remedian nada. Al despertar el
dolor persiste.
Shakespeare en su Romeo y
Julieta decía: Los sueños, esos hijos locos de una mente ociosa.
Decir que la vida es sueño y los sueños, sueños son
es bonito, pero de ahí no se puede inferir que la vida sea un sueño, ya que las funciones vitales como el latido del corazón, el comer y el defecar no son sueños, ni son sueños la enfermedad o la torpeza. Las frases de algunos curas
del Siglo de Oro español son auténticas majaderías que hicieron fortuna por su
belleza y calaron hondo.
Sólo la Ilustración había de
poner en claro las cosas. Hubo de llegar el afrancesado y descreído Francisco
de Goya para escribir en uno de sus caprichos: el sueño de la razón produce
monstruos.
El sueño es ficción y la
literatura sobre los sueños es literatura de ficción, como lo es el ensayo
teológico, lo cual no significa, sin embargo, que no sea una bella literatura y que además puede servir
para pasar el rato y puede incluso ennoblecer el espíritu.
Supongo que se dice en calidad de utopía.
ResponderEliminarLa vida es sueño no es mñás que hablar de lo intangible, lo que no tiene precio y no se puede comprar, o sea Metafísica.
La frase puede ir acompañada del menú : "todo el mundo sueña con quien no duerme", porque los sueños no pueden ser dominados ni hay manera alguna de domesticarlos.
Y no creo que la racionalismo pueda por mucho dominar el sueños, los sueños. estos, a mi parco entender, son fruto del empirismo, o sea, la antítesis de la razón. Sólo con experiencias se puede soñar, donde sólo hay raciocinio sólo se puede especular.
Salut
Miquel, los sueños escapan del control de la razón, lo sabía Freud y ahí metió el dedo. Pero de eso a decir que la vida es sueño, por más bonito que parezca, hay un trecho.
EliminarMuy dados a estas majaderías andaban aquellos curitas del Siglo de Oro. Parece que ahora retornemos a estas pamplinas, cuando un curita metido a vicepresidente también quiere que aceptemos un sueño como si fuera un programa de gobierno, mientras los ensoñados pasan hambre y el panorama laboral es una desgraciada verdad que no entiende de sueños.
Dejen de especular y solucionen los problemas.
Salud
Luego hay auténticas pesadillas estando despiertos, que se prolongan durante la noche y se cuelan en tu cama y perturban los sueños.
ResponderEliminarSaludos, Francesc.
Amigo Cayetano, las auténticas pesadillas que contemplamos estando despiertos y que luego no nos dejas dormir. No hay más que ver el panorama desgraciado de una sociedad inculta que vota con la incultura en la mano y la estulticia en la mente.
EliminarSalud
Evidentemente, ese fragmento que pertenece al monólogo de Segismundo no admite análisis racional alguno. Es una mera expresión lírica. El Sr. Rajoy tambien define lo definido. "un plato es un plato", pero de poesía, nada de nada...
ResponderEliminarUn abrazo
Amigo Luis Antonio, lo malo de todo este asunto es que estas majaderías no admitan un análisis racional y que una mera expresión lírica -bella por otra parte- se convierta en programa de gobierno.
EliminarSalud
Una vez escuché a uno que sabía del tema que sin los sueños de cada noche nos volveríamos locos. Algo remedian, pues, siquiera por unas horas. Luego, los dolores de las causas varias que nos acechan o hacen diana en nosotros continuarán. Si las cuitas son de baja intensidad los sueños habrán ayudado. Si las preocupaciones tienen mala cura ya es harina de otro costal.
ResponderEliminarYo añadiría a tu último párrafo: Lo cual es razonable (el uso y aportación de esa literatura, etc.)
Salud siempre.
Amigo Fackel, ese uno que sabía del tema, parecía recoger la teoría de Freud. Que me perdonen pero yo a veces he creído que el psicoanálisis es también una ficción.
EliminarSeguramente los sueños tienen un efecto protector y cuando dormimos son profilácticos, pero cuando estamos despiertos más nos vale que nos protejamos de ellos.
Salud
Fisuras o grietas desafiantes en ciertos muros; o más allá vanos y puertas, umbrales esplendorosos que hacen correr al aire; purifican y oxigenan… Los sueños sueños son y quizás algunos, fisuren razón y corazón.
ResponderEliminarUn abrazo
KovadeXundra
Querida Kova, hay muros que apenas soportan algunas débiles solicitaciones de compresión, otros más sólidos pueden llegar a aguantar esfuerzos considerables, en cualquier caso hay que tener cuidado y llevar a cabo un mantenimiento constante de los muros. Debemos cuidar que los mechinales permitan la salida de las aguas acumuladas en el intradós y que las puertas no tengan las bisagras oxidadas. Que puedan abrirse siempre para permitir la entrada de aire fresco.
EliminarLas siete puertas siempre a punto para la obertura.
Un abrazo
Yo creo que son necesarios, aunque a veces la realidad de un plumazo te destroza todo.
ResponderEliminarGracias a esas personas que tienen una sensibilidad especial.Creo modestamente que nos hace falta escudarnos de vez en cuando entre esos algodones, es que sino, la realidad es muy fea...
Un abrazo feliz domingo.
Querida Bertha, los sueños, sobretodo cuando estás despierto, pueden enmascarar la realidad, algo que por otra parte podemos llegar a agradecer, pues la realidad es muy negra.
EliminarYo creo que la sensibilidad es algo que se tiene tanto en sueños como sin ellos, es una facultad autónoma.
Un abrazo
El asunto es que los sueños forman parte de nuestra psique, una realidad paralela, de la que desconocemos casi todo. Los sueños no pueden colectivizarse y cuando lo hacen, traen desgracias.
ResponderEliminarUna fantasía soñada de manera consciente es un alimento personal e intransferible, inspira y es creadora. Importa saber dónde hay que poner el límite para no tocar la locura.
Abrazos
Querida Amaltea, soy muy limitado, apenas conozco esta realidad que me rodea, así que la otra, la paralela, se la dejo a los que saben de estas cosas.
EliminarEn efecto, importa saber dónde poner el límite, más allá de esto se encuentra el océano de las tinieblas.
Abrazos
Un ejemplo evidente y palpable de estos días, semanas, meses. Los sueños de la sinrazón política, sin ir más lejos. Los sueños de fantasías de mayorías y minorías, de nuevos y viejos Estado que no serán, etcétera. Viene que ni a pelo tu entrada.
ResponderEliminarAmigo Gregorio Samsa, ensoñaciones que no llevan a ninguna parte, esto es lo que marca nuestro sentido de convivencia.
EliminarSalud
Se me ocurre que tal vez exista un, digamos, “lenguaje” onírico lleno de símbolos que la razón es incapaz de descifrar. Que tal vez haya algo más de lo que aparentemente nuestros cinco sentidos pueden percibir. Que tal vez haya que aparcar durante algunos minutos al día el raciocinio para despertar otros sentidos adormecidos que no somos conscientes que poseemos, al igual que tampoco sabemos de lo que es capaz nuestra mente. Sobre eso la física cuántica tiene mucho que decir. También habló sobre ello Einstein, Víctor Hugo y otros autores. Tal vez sea sobre el despertar de esa conciencia a lo que se refiere Calderón en su poema, a pesar de todos los artilugios retóricos utilizados para embellecer, y a la vez oscurecer, el mensaje.
ResponderEliminarNo es más que una elucubración pero tu entrada invita a la reflexión y al debate.
Un abrazo.
Querida Rita, seguro que tienes razón, pero a mi se me escapan los mundos simbólicos y casi todo lo que no se percibe con los cinco sentidos, ya sabes que aspiro a tener la sensibilidad de un zapato y con esta aspiración me resulta incomprensible la obra de Calderón de la Barca.
EliminarTodo esto es muy complicado. Más allá de la isla de la razón se extiende un mar de tinieblas.
Abrazos
¿Razón soportada por la ilusión de los sentidos? Pero como veo que vas por otros derroteros, lo diré de esta manera:
ResponderEliminarUna inconmensurable mayoría (idealistas, fanáticos, dogmáticos, pragmáticos, fetichistas y absentistas -en el poliédrico sentido de esta palabra-) pudiera decirse que vive "realmente" en un sueño, y no ve nada más que las narices de ese sueño.
Por otro lado, tal vez haya una minoría mal contada, a la que no le queda otra que perseverar un más o menos incómodo duermevela entre tantísimo ronquido.
En el ser humano, lo que no es ficción es recuerdo. ¡Devaneos de la razón!
Coincido amigo Abraham. Demasiadas veces la razón debe hacer un gran esfuerzo para ir soltando el lastre de las ensoñaciones.
EliminarEn efecto idealistas, fanáticos, dogmáticos, pragmáticos, fetichistas y absentistas, todos, en una gran multitud viven en un sueño inducido.
Salud