miércoles, 21 de septiembre de 2011
El legado
No exigimos al cielo que dé explicaciones, ni que justifique la intensidad de su azul, tampoco las nubes explican cómo se amontonan, ni siquiera nos dicen si fue Zeus quien las puso así.
Algún manierista florentino acumuló las nubes a modo de trampantojo creyendo imitar a la Naturaleza.
Ha sido el arte quien ha escrutado los mundos primordiales, ha planteado el orden de la noche y de las sílabas, ha lanzado su mirada sobre el progreso de las llamas, ha medido la altura del vuelo de la alondra y ha mostrado, en fin, la huella más o menos vacía del hombre.
Estas presencias naturales son así. Son como son, transidas de datos, con sus contenidos dibujados; porque así fue como el arte nos transmitió su legado.
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Tondo....Manolo Reguera, mí primer profesor de H del Arte, se emocionaba con los tondos....Y con los manieristas....Comenzaba " a la maniera de Rafael ¡¡¡¡¡¡¡ siiiiiiiiii al 1520 ¡¡¡¡ y al final discernimos que aquello era importante....han pasado años....Un placer estar por aquí...y ver un tondo ...y el comentario aledaño...
ResponderEliminarHubo un tiempo en que veía una pintura de Miguel Ángel y pensaba en la escultura que nos habíamos perdido. Ahora ya no tanto, porque el dibujo está detrás de todo, pero…
ResponderEliminar“No vamos a exigir explicaciones al…”
Un saludo Francesc
LUIS
Así es, amigo.
ResponderEliminarUn saludo
Luis, el mismo Miguel Angel ya afirmó que el dibujo era el fundamento tanto de su pintura como de su escultura. Como en todos los renacentistas, sobre todo antes del manierismo, el dibujo es el sustrato de sus obras.
ResponderEliminarSalud
Amigo Miquel, este Tondo es una maravilla, un puntal de nuestro patrimonio artístico. En cuanto al manierismo, opino que Miguel Angel aún no era manierista, estos vinieron luego, de la mano de Vasari. Prometo, Miquel, escribir un post sobre el manierismo.
ResponderEliminarSalud
Esgarracolchas, ¡qué ilusión verte por aquí!
ResponderEliminarun saludo
el arte no es más que una imitación de la naturaleza.
ResponderEliminar¿Para qué buscar más explicaciones?
ResponderEliminarNos gusta el escorzo, y sobre todo esos ojos en blanco focalizando toda nuestra atención.
Si,tienes razón, no exigimos nada, simplemente disfrutamos.
Amigo Puigcarbó, existen opiniones muy solventes que dicen lo contrario, que es la naturaleza la que imita al arte, naturalmente las hay que dicen que es el arte el que imita. Si fuera esto segundo, te puedo asegurar que el arte es mucho más que imitación.
ResponderEliminarSalud
Estimada Amaltea, es una composición extraordinaria. Me detuve ante el fugitivo escorzo mientras las aguas del Arno discurrían tranquilas y quise después huir por el corredor de Vasari, el calor de finales de julio desapareció de repente.
ResponderEliminarSalud
Me gustó mucho este último...: "Estas presencias naturales son así. Son como son, transidas de datos, con sus contenidos dibujados; porque así fue como el arte nos transmitió su legado".
ResponderEliminarAndri Alba
Amiga Andri, agradezco su comentario. A partir de ahora visitaré su nuevo blog.
ResponderEliminarSalud