martes, 20 de septiembre de 2011
Edificios con apellido
Se puso un cinturón de piel y el diseño de su hebilla me hizo reflexionar sobre la vanidad de los diseñadores. La hebilla no era otra cosa que el nombre en letras metálicas, muy grandes, del modisto que diseñó el cinturón. Se trata de uno de estos modistos mediáticos (Moschino) que se prodigan en las pasarelas de la moda, y al que no se le ocurre otra cosa que utilizar su propio apellido como elemento de diseño. Ya existía el precedente del modisto Valentino ponía su nombre estampado en las corbatas.
He imaginado de repente, a uno de estos arquitectos famosos que aparecen fotografiados en los periódicos al lado de los políticos, que proyectaba un gran edificio cuya forma era su nombre, el nombre del arquitecto de campanillas. Podríamos ver la foto de un rascacielos, plantado en medio de la ciudad, en forma de apellido, que se ha proyectado como un alarde de vanidad sin atender a la proporción, a la construcción ni a la utilidad.
Ya hemos visto que hay arquitectos que han proyectado rascacielos en forma de otros atributos de su personalidad.
Además de la presión mediática, el panorama del diseño se encuentra sometido a una presión comercial feroz. Para alimentar la voracidad de la industria, el diseñador debe ir creando obligatoriamente y sin detenerse. La industria exige la producción de edificios y objetos inútiles para sostener el consumo.
Imagino la angustia de aquel diseñador que debe dibujar, por ejemplo, una silla o un cenicero nuevos, de diseño original, y que debe ir repasando todos los diseños de sillas y ceniceros existentes y estimular las neuronas para hacer una pieza diferente, siendo consciente de que los demás ceniceros o sillas ya funcionan bastante bien.
Con un programa así, puede salir el diseño de la pieza más extraña que nos podamos imaginar.
¿A dónde lleva toda esta apuesta estéril?
Aquí la creación artística no se sostiene por ninguna otra razón que no sea el puro interés económico. Ni ética, ni estética, ni siquiera, pura necesidad humana.
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de acuerdo totalmente con el final de su escrito...no se sostiene ...
ResponderEliminarFrancesc, se ha impuesto la bestia mercantil, en su peor sentido. El mundo está sometido al merchandising, todo lo que no pueda ser vendido, reproducido en mil cachivaches e iconografiado, no vale nada. Sea arquitectura, cocineros famosos, moda o literatura, perdón, libros. No importa si se puede sacar provecho económico, o sea,si tiene posibilidades de convertirse el hecho creativo en marca internacional que de pie a una negocio, si es así,la cosa marcha.
ResponderEliminarPero no todo está perdido, mientras exista internet sin censura, la libre circulación de ideas y creatividad tiene un territorio amplio y muy fecundo, sólo hay que pasarse por blogs como el tuyo.
Un abrazo, ya cansada de tanta desconexión por esos mundos.
Miquel, y después se llenan la boca de sostenibilidad.
ResponderEliminarSalut
Querida Amaltea, celebro ver tus comentarios otra vez por aquí, conectada otra vez al territorio amplio y fecundo de internet que de momento no tiene fronteras.
ResponderEliminarComo tu dices, los arquitectos, los cocineros y la madre que los hizo a todos juntos, todo un corralillo de vanidades y espectáculo.
"E la nave va..."
Salud
querido y finisimo amigo cornado, les escrito este breve coment. para saludarle. Para decirle que estoy muy bien y con mucha fuerza, renovandome.
ResponderEliminaraprovecho para reiterarle mi admiracion y para decirle que nunca dejo ni dejare de leerle, puesa es usted de lo mejor que tiene este panorama bloggero...aunque ya no le comentare tanto como antes. sigo aprendiendo (ya sabe ustede que aprender es una de mis mas grandes obsesiones y no conseguirer detenerla mientras vida tenga y usted para mi una eminencia admirable)
No dire mas, solo que deseo que siga bien y que pronto volvere. un abrazo cordial desde mi paisito, rep. dominicana.
vuestra insoportable siguidora,
andri alba. :)))))))
usted sera el primero en saber que estoy cuando regrese, asi que me seguira creciendo peleo aunque me lo corten mil veces. Pues no soy calva mas que momentaneamente.
ResponderEliminardeu deu
Querida Andri, celebro su recuperación y que esté bien. No sospechaba nada. Deseo de todo corazón que vuelva usted a la vitalidad que le caracteriza. Si de algo puede servir este blog de pequeñas divagaciones, ahí va, que vuele por los aires y que atraviese el Atlántico.
ResponderEliminarAhora más que nunca, y con mis mejores deseos,
salud
Me encanta volar, ya vuelo. Vuelo diario imaginario. Eso tambien vale, believe it or not.
ResponderEliminarAmigo Francesc, hay engaños en este mundillo, sólo hace falta una brocha, un poco de pintura y el siguiente paso es realizar una exposición, hasta un niño podría hacer tal falsificación.
ResponderEliminarHoy se lleva el arte de vender o comercial, lo impone la moda, el consumo... hay mucho papanatas y mucha falta de sentido común.
Afortunadamente todavía quedan artistas cuyas creaciones no son impuestas por asesores, que les gusta perfeccionarse y mejorar y que utilizan el arte como medio de expresión sin tener en cuenta los beneficios, con esos hay comunicación recíproca ya que lo que buscamos al contemplar una obra es satisfacción.
Saludos
Amiga Loli, el tiempo acaba depurándolo todo.
ResponderEliminarSalud
Nom: Enric Cornadó.....
ResponderEliminarAquest edifici on està?¿?
Enric, inusual coincident de cognom, aquest edifici és només un projecte, es tracta d'una imatge virtual d'un estadi a construir a un país d'aquests que encara viuen en l'ostentació, on encara hi ha arquitectes que s'enlluernen amb la llum de la vanitat.
ResponderEliminarSalut
Enric Cornadó:
ResponderEliminarGràcies per l'aclariment, el cognom no és tan inusual, a Manresa hi ha uns quants (tots familia), i venim de la província de Lleida...a St. Vicenç de Castellet també hi ha però no familiars.
Att. Enric
Sí, Enric, el cognom prové de les terres de Lleida, em sembla que ve, més concretament de Les Garrigues, s'ha estés poc i sé que una branca s'estengué per el Bages i una altra menys prolífica va anar cap a Barcelona. Sobre el significat de "Cornadó" sembla que hi ha diverses opinions, hi ha qui diu que té ascendència sarda, hi ha qui diu que él el sobrenom d'algú que es dedicava a algún ofici relacionat amb el tractament de banyes (corns), també he sentit opinions que es refereixen a un accident geogràfic, i encara més imaginatiu hi ha qui diu que Cornadó significa "cor nadó" és a dir: un cor jove.
ResponderEliminarSalur
Enric Cornadó:
EliminarConcretament venim de les Garrigues, d'un poble que es diu Llardecans, i que moltes gràcies per a tot.
Benvolgut Enric, la meva familia, tots dos cognoms (Cornadó i Estradé), prové de l'Albi.
EliminarSalut