La prefiero de Menina que de vicepresidenta
viernes, 9 de mayo de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Las imágenes usadas para acompañar los textos son exclusivamente ilustrativas y didácticas y no representan ningún tipo de ingreso económico o actividad comercial para los autores, colaboradores, correctores o administradores de este sitio web.
Mi piace il tuo scherzo, ancora que per me, la incontro piu vicina a la porcellina Peggy.
ResponderEliminarSaluti.
Amico Dapazzi, seguro que es "piu vicina a la porcellina Peggy" pero ahora tal como está el asunto de las asociaciones animalistas, he preferido referirme a una obra cubista antes que a un ser vivo.
EliminarSaluti
No he entendido nunca a Picasso. Para la composición del color me gusta Miró. Para destructuración de la figura, Gris. Para la poesía en su estilo, José Vilató Ruíz -J. Fin-, a la sazón familiar íntimo del creador de la Menina de la foto.
ResponderEliminarPero como no se trata de eso sino de la comparanza entre la Menina y la vicepresidenta, decirte que si, que estoy de acuerdo.
Salut
Amigo Miquel, las comparaciones son odiosas y a veces son más odiosos aún, alguno de los elementos comparados.
EliminarSalud
El cubismo no permite entrever la podredumbre interior. Sólo la fachada. Yo también me quedo con la del lienzo.
ResponderEliminarAmigo Cayetano, coincido contigo, yo también me quedo con la del lienzo.
EliminarEl cubismo nos presenta una multiplicidad de superficies, es poliédrico, siempre son facetas planas de la realidad.
Salud
¡Vas a comparar! A la menina de Picasso, hija de su madre, la de Velázquez, no les falta abrir la boca para regalarnos una imagen real y no la de cartón piedra que se adivina en la otra.
ResponderEliminarQuerida Amaltea, no, no y no, no voy a comparar, es sólo una cuestión de preferencias y en todo caso es una reflexión sobre la visión de la realidad. Una es la expresión de las diferentes caras de la realidad y la otra, la antigua, muestra una cara elocuente que no necesita descubrir las caras ocultas; la menina adivinada es siniestra y su elocuencia nos hace temblar.
EliminarUn abrazo
Pero, ¿encuentras parecido, hermano? Mira que las de Velázquez tenían pedigree de familia noble y las de Picasso son la alegría de la huerta, pero la vallisoletana, aunque mantiene el tipo en su puesto publicitario, ha debido llevar una puta vida, según sus propias palabras, y eso da pena, ¿no? Personalmente no la soporto no sé si por sus políticas chapuceras o por su gesticulación de reina del mambo en las ruedas de prensa que convocan ad hoc. Pero es la pose generalizada entre las damas de la corte nada milagrosa de estos días.
ResponderEliminarAmigo Fackel, es una cuestión de preferencias formales. Otra cosa son las preferencias funcionales.
EliminarSalud