Die Vision des hl. Hubertus
Wilhelm Carl Räuber (1849-1926)
El arte simbólico es pedante. Lo es porque cree poseer los arcanos de la naturaleza y que debe explicar a los mortales algunos significados – solo algunos- del mundo o del universo todo. Considera que hay significados en la realidad más allá de la propia naturaleza de las cosas y que solo una didáctica formal podrá esclarecer conceptos, causas o trascendencias.
En
la historia del arte encontramos que después de algunos periodos simbolistas se
produce un acercamiento a la razón. El simbolismo abandona su pedantería y su afán
por la didáctica y cede, no sin cierto enojo, a la constatación de que la
complejidad es mensurable y que todo individuo tiene la capacidad de conocer la
naturaleza sin la mediación de los símbolos.
Se
desvanece el símbolo. Cae la didáctica y cae toda vanagloria sin que medie una
reflexión sobre la razón misma, e inmediatamente, se produce un desplazamiento
del centro de atención, generalmente de un símbolo a un objeto o cuerpo vivo,
puede ser incluso que se trate de un “cuerpo enamorado”, y descubrimos que en
ellos reside la realidad en su dimensión más excelsa, sin que ningún símbolo la
acompañe. Y, gracias a la ciencia, descubrimos también que la realidad es
mesurable –he dicho mesurable, no miserable.
Algunos
artistas, simbolistas tardíos, podrán especular sobre el cuerpo enamorado,
sobre su espíritu, sobre sus miserias y sobre la contingencia de una medición
extra-física. El arte simbólico atrae,
presenta un misterio que muchas veces es algo exótico y otras veces provoca una
atracción que a algunos los llega a zarandear. También la realidad zarandea al
más pintado y con todo esto vamos pasando el rato, en mi caso procurando evitar
los meneos espirituales exagerados.
Se
me escapan las sustancias espirituales y no puedo razonar sin medir. Procuro
apartarme del fuego cruzado entre la fe y el escepticismo, fuego de estopa,
para mí son llamaradas espurias, pues todo mi esfuerzo es llegar a alcanzar la
espiritualidad de un zapato.
La exageración en cualquiera de sus manifestaciones estéticas siempre empalaga y harta. Unas gotas de simbolismo en la poesía sencilla de Machado (norias, caminos, atardeceres...) la enriquece.
ResponderEliminarUn abrazo, Francesc.
Amigo Cayetano, comparto esto que dices, algún aditamento simbólico como sazón, no queda mal.
EliminarAbrazos
Ay...¡ Mísero de mi, ay infelice ¡.
ResponderEliminarBueno, por turnos y por cosas que están separadas aunque no lo parezca.
El simbolismo no es más que un movimiento artístico. J.E. CIrlot lo describe muy bien en su diccionario, y yo, que soy un mindundi, creo entender algo más.
Es evidente que si hablamos de Poussin, se nos dirá que es un simbolista , pero es que simbolista significa , orden, lógica y clarividez, al menos en el mundo de Poussin, si quitamos títulos, claro está, a sus obras, muchas de ellas nomenclaturadas con el nombre de Arcadia.
"...Algunos artistas, simbolistas tardíos, podrán especular sobre el cuerpo enamorado, sobre su espíritu, sobre sus miserias y sobre la contingencia de una medición extra-física..." , si los Prerafaelistas, quizás, Rossetti el primero, pero nos habla de amor y el amor no deja de ser efímero y transitorio, y por ende, pasajero.
No me gusta medir, no lo acepto. Un cuadro no se mide por su belleza. El viaje a la Arcadia no se puede cuantificar lo bello que es o no lo es dependiendo del 1 al 10. O gusta o no. Así con todo.
Y yo, como creo que muy bien sabes, soy un metafísico con la suela del zapato rota.
Un besote ¡¡¡
Miquel, los mundos simbólicos me sobrepasan. Cirlot es interesante, ya sabes que admiro cómo clasifica las tendencias artísticas y me gustan muchos de sus poemas, especialmente los largos, los más largos.
EliminarPoussin se vale de ciertas alegorías o algunas imágenes simbólicas para representar virtudes como el orden o la mesura, las dos son realidades extra-físicas.
En cuanto a los prerrafaelitas tengo reservas estéticas, creo que el exceso de detalle les perjudica, me gusta de ellos su afán por el orden y la mesura.
Porque a mí me gusta medir, pues si no mido me equivoco y como que aspiro a alcanzar la espiritualidad de un zapato no voy más allá de lo que puedo medir utilizando todo lo que la ciencia nos pone a mano.
Abrazos
"Primero miramos las colinas en la pintura, luego miramos la pintura en las colinas".
ResponderEliminarLi Liweng.
Muchas gracias Chiloé. El pensamiento de un esteta como Li Liweng tiene una carga trascendente que va más allá de la pintura.
EliminarSaludos
que tema este... debe ser natural el arte' criptico? dejar un mensaje?
ResponderEliminarla verdad que no tengo respuesta para eso... creo que en todo caso me conforma conque sea bueno... a mi mirada claro ja... en fin, saludos...
No, JLO, el arte no es ni debe ser natural, el arte es una creación humana, es puro artificio y especulación estética, es expresión formal de un pensamiento o de una sensación, o de una emoción.
EliminarSalud
"Se me escapan las sustancias espirituales y no puedo razonar sin medir."
ResponderEliminarEsta frase dice mucho... primero, que me lo he leído completo y segundo que la razón necesita medidas comparativas.
El arte es algo que aparece cuando desaparecen esos caprichos temporales, como comer, no pasar frio y demas...
No es necesario, pero si recomendable, luego cada uno lo ve de forma dispar, por ejemplo en la imagen que has puesto arriba inmediatamente he pensado que el suelo estará humedo y ese hombre se mojará la ropa... Quizás es que tengo el sentido artístico un tanto deteriorado o quizás es que he estado en demasiados bosques...
Un saludo
Amigo Temujin, ya ves lo que he dicho, que espero alcanzar la espiritualidad de un zapato, esto es sin pasar frío y después de haber comido. Lo simbólico no lo comprendo y menos aún la acción que lo simbólico desata, además, suelen ser acciones irracionales.
EliminarSaludos
El simbolismo produce efectos confrontados: ahuyenta a según quienes y fomenta la participación y complicidad.
ResponderEliminarUn abrazo, admirado Francesc
Amigo Luis Antonio, cuando lo simbólico genera una confrontación ya tenemos el "sarao" montado.
EliminarAbrazos y admiración recíproca.