El Cirujano de Jan Sanders van Hemessen (1500 -
1566)
La historia es cíclica, se repiten los mismos
errores de siempre. Avanzamos a paso de
paloma y retrocedemos a paso de caballo, así se lamentaba Nietzsche.
De vez en cuando, hay que volver al orden del mundo,
echar una mirada a la realidad y evitar la obscenidad de los sentimientos
personales, dejarse de inteligencias emocionales y de sensiblerías cursis y
ñoñas. No caer una y otra vez en fanatismos y supersticiones, pues no hay ninguna
evidencia de intervenciones divinas en los asuntos humanos.
Contra el adoctrinamiento sectario, contra el pensamiento arbitrario, contra la enajenación que nos impone el poder, solo cabe la vuelta a una nueva Ilustración. Una vuelta a la Razón. Una revolución ilustrada que discuta, analice y lo agite todo; tal como decía Jean le Rond D'Alembert:
Contra el adoctrinamiento sectario, contra el pensamiento arbitrario, contra la enajenación que nos impone el poder, solo cabe la vuelta a una nueva Ilustración. Una vuelta a la Razón. Una revolución ilustrada que discuta, analice y lo agite todo; tal como decía Jean le Rond D'Alembert:
desde la metafísica a las materias del gusto, desde
la música hasta la moral, desde las disputas escolásticas de los teólogos hasta
los objetos del comercio, desde los derechos de los príncipes a los de los
pueblos, desde la ley natural hasta las leyes arbitrarias de las naciones, en
una palabra, desde las cuestiones que más nos atañen a las que nos interesan
más débilmente.
A menudo pienso en ello, en los principios que infundieron
el pensamiento ilustrado y un contrapunto romántico invade el espacio. ¡Maldita contradicción la mía!, las notas de Schubert suenan mesuradas, acompañando algún poema de Müller.
Sigo en mis trece, convencido de las bondades de la agitación ilustrada y me complazco con las lecturas:
Sigo en mis trece, convencido de las bondades de la agitación ilustrada y me complazco con las lecturas:
del valiente Claude-Adrien Helvétius,
de Vittorio Alfieri, que fue martillo de tiranos,
del lúcido Bernard le Bovier de Fontenelle,
del vital Giacomo Casanova,
del audaz Paul Heinrich Dietrich von Holbach, Barón d’Holbach,
del inteligente y tolerante François Marie Arouet Voltaire,
del natural Nicolas Edme Rètif de la Bretonne,
de Louis Sèbastien Mercier que tenía la palabra robusta,
del universal y enciclopédico Denis Diderot,
y del juicioso Cesare Beccari.
de Vittorio Alfieri, que fue martillo de tiranos,
del lúcido Bernard le Bovier de Fontenelle,
del vital Giacomo Casanova,
del audaz Paul Heinrich Dietrich von Holbach, Barón d’Holbach,
del inteligente y tolerante François Marie Arouet Voltaire,
del natural Nicolas Edme Rètif de la Bretonne,
de Louis Sèbastien Mercier que tenía la palabra robusta,
del universal y enciclopédico Denis Diderot,
y del juicioso Cesare Beccari.
En lugar de Jean Jacques Rousseau que era ingenuo y sensiblero, voy a citar a Étienne de La Boétie (1530-1563) que a sus 18 años escribió “Discurso sobre la servidumbre voluntaria”, en este magnífico opúsculo de 18 páginas ya anticipa de forma muy clarividente El Contrato Social de J.J. Rousseau.
No me extraña que, de vez en cuando, con ánimo tan solo de respirar un poco, te apetezcan unas cuantas notas de música romántica. Nos pasa a más de uno. A pesar de ser la Ilustración un movimiento fundamental en la historia y en la formación del pensamiento moderno, desde un punto de vista estético, fundamentalmente literario, no hay cosa más aburrida que la racionalidad llevada a sus últimos extremos, llena de normas y moralejas, que encorsetan cualquier temática. La literatura didáctica de los Moratín, los Samaniego o los Iriarte, se puede convertir el algo insufriblemente soporífero. Me quedo con la Ilustración en los ámbitos filosófico y político. Y "El sí de las niñas" lo dejo para otros.
ResponderEliminarUn saludo, amigo Francesc.
Amigo Cayetano, la literatura de la Ilustración peca a veces de ingenua y otras veces resulta pesada, y en el caso de los autores españoles encuentro una gran carga de didactica y puede cansarme, cuando esto ocurre podemos recurrir a las matemáticas. Si el aburrimiento llega en días de otoño, no me importa recurrir a Schubert.
EliminarAbrazos
La historia es cíclica, es verdad, pero lo es porque el hombre no ha cambiado en nada su manera de pensar.
ResponderEliminarRepetimos los mismos errores porque nuestro funcionamiento cognitivo es idéntico desde que habitamos en la tierra. Nos mueven las pasiones, y pensamos que la vida que tenemos nos durará eternamente.
Salut
Amic Miquel, sí la historia es como la noria que mueven las Horas (Eunomia, Diké y Eirene) gira sin cesar. El hombre situado en la rueda siempre equidista del eje. Las cosas cambian y todo sigue igual.
EliminarSalud
Aunque no he leído a todos los que citas y escasamente a otros, sigo considerándolos faros. La Ilustración, desde entonces, no ha dejado de existir ni de iluminar. Los avances científicos y el conocimiento en general la han afirmado. El tema es que hoy todo es mercado y que el desarrollo ético de las formas de vida que aquellas gentes iban considerando hoy se difuminan en medio de lo que es antiética, el mercado mismo. Todo se justifica en aras del mercado y se chantajea con el mercado. Del sentido de las vidas humanas se ha hecho mercado siempre y ahora más que nunca. Mercado que ciega y pone en cuestión la perspectiva humana. Hay mercado y hay defensa del mercado, que va desde las Bolsas a los Gobiernos a los organismos tipo OTAN, etc. En fin, todo hasta que salte por los aires.
ResponderEliminarVoltaire, Holbach y De la Boetie son imprescindibles. Modernos como pocos. Ríanse de los pseudofilósofos de nuestro tiempo y de los politólogos que no van a ninguna parte.
Gracias por hablar de esa gente. En España se les conoce poco, mal y sin interés. Damos lo que damos de sí, nosotros.
Amigo Fackel, ojalá la Ilustración iluminara más. La Razón es imprescindible para superar los desaguisados que continuamente están produciendo los mercados, si no echamos un poco de racionalidad a los comportamientos individuales y si no exigimos esta racionalidad a los políticos, no vamos a salir de esta maraña endiablada donde hay demasiado crimen y demasiado dolor.
EliminarLos autores que he detallado han sido casi proscritos en España, en las escuelas apenas los han citado y todos sabemos por qué han sido condenados al ostracismo.
Salud
Sí, con cada nuevo día, resulta más y más perentorio frenar el despotismo iletrado que nos consume como sociedad y como seres humanos. Saludos.
ResponderEliminarAmigo El Éxodo, esta pandilla de iletrados nos obligará a escondernos en un hipogeo (ὑπόγαιον), en una galería subterránea. Con tanta incultura en el poder regresaremos al Calcolítico ibérico. Ahora más que nunca la revolución ilustrada es una necesidad vital.
ResponderEliminarSaludos