Más de un teórico ha definido
el arte como el resultado de la lucha entre Apolo y Dionisos. Mesura y locura se suceden en la historia del
arte y algunas veces se entremezclan.
Cuando vence lo apolíneo, el artista tiende a contemplar la realidad tal como es, con
su complejidad y su belleza. Cuando esto ocurre, la mano del artista obedece al
rigor de la medida y su pensamiento obedece a la razón.
Cuando es
Dionisos quien vence, el artista penetra más adentro de la piel, busca entre la maraña de
la psicología y atiende al sentimiento.
Clásicos y románticos. Unos
buscan la belleza de la realidad y otros la expresión de las emociones.
Después del clasicismo
greco-romano vino una larga noche que sumió el arte de occidente en la oscuridad. La
voluntad de arte (Kunstwollen) quedó reducida a una didáctica o a un conjunto
de símbolos.
Para recuperar la Kunstwollen tuvo que llegar el Renacimiento, fue un instante en la larga marcha de
los siglos. La voluntad de arte se situó en la cresta, miró la belleza y el artista no quiso llorar, pues llorar es la expresión de un sentimiento y esto quedaba para los
manieristas que tampoco lloraron, se reprimieron, se miraron el ombligo y
hablaron de arte.
Los manieristas se expresaron
y, con una cierta amargura, contemplaron cómo luchaban Apolo y Dionisos.
El dios de la embriaguez vino más tarde, cuando los amantes suspiraron bajo el claro de luna
El dios de la embriaguez vino más tarde, cuando los amantes suspiraron bajo el claro de luna
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No podría definir lo que es el arte. Sólo se que algo me agrada o no me dice nada. Nunca nada me desagrada del todo. Pienso que el artista ha querido decir algo que no capto, y él no es el culpable.
ResponderEliminarMe pasan factura el poco entendimiento, un pelín de holgazanería por no querer estudiar la materia, los prejuicios y a veces las prisas por no detenerme un poco más ante la obra.
No estropearía nada, pero si dejaría bajo llave alguna obra que no me dice nada, a pesar de lo dicho anteriormente.
Un abrazo
Amic Miquel, hay un debate histórico en cuanto a la apreciación del arte y especialmente en cuanto a la materia estética. Unos dicen que la belleza está en "la cosa en sí", es decir que la belleza es algo sustancial del objeto y otros dicen que la belleza depende de la percepción del espectador. En el primer grupo estaría el pensamiento clásico y en el segundo el pensamiento romántico.
EliminarYa sabes que soy un militante anti-romántico.
Abrazos
Porque en aquella apartada orilla -Tenorio dixit- se respira mejor. Se ve que el vino de la Hostería del Laurel tenía alta graduación.
ResponderEliminarSaludos, Francesc.
Amigo Cayetano, los vapores espirituosos trastornan el magín. La percepción de la obra de arte se resiente, tanto en una orilla como en otra.
EliminarSalud
Me ha encantado tu interpretación. Sobre todo esa versión del manierismo. Yo creo que el dios potente de la cultura griega que siguió desarrollándose en otros marcos es precisamente Dioniso, tan potente que el dios Cristo tuvo que beber de él. Para el tema de Dioniso y Ariadna te recomiendo el libro "El despertar del alma", de David Hernández de la Fuente, en Editorial Ariel.
ResponderEliminarGracias amigo Fackel, Sí, los manieristas miraban mucho, su mirada se desplazaba desde su ombligo al horizonte lejano.
EliminarNo conocía el libro de Hernández de la Fuente, lo buscaré. En cuanto a la lucha entre Apolo y Dionisos encontramos mucho material y pensamiento en Nietzsche y en Eugenio Trías.
Magnífico. Así de apolíneo-romantico te lo digo. Quien vence al dios de la embriaguez?
ResponderEliminarQuerida Gemma. Yo creo que el cálculo puede vencer. Me refiero al cálculo sensible, al ingenio inicial que se nutre de analogías y metáforas, sobre este estrato podemos edificar los edificios más bellos de la historia.
EliminarAbrazos
Yo también lo creo, querido Cornadó. Gracias por esta respuesta tan inteligente y alentadora. Te admiro muchísimo. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias Gemma, agradezco tus elogios, desde luego inmerecidos. Ya sabes que soy un pobre opinador de cuestiones estéticas y muchas veces, entre lo jocoso y lo irónico, suelo caer en alguna frivolidad. Afortunadamente mis amigos no me lo tienen en cuenta, y así, gracias a ello, continúo con buen humor.
EliminarUn abrazo
Dionisos está de vuelta, pero no con la intención de proteger a las parturientas -a él se le invocaba- sino de mostrar que hemos de mirarlo con otros ojos, temerosos quizás, para descubrir que Dionisio es la otra cara de Hades, como explicó Heráclito.
ResponderEliminarUn sosiego leerte.
Querida Amaltea, una lucha incesante y creativa. Dionisos está siempre presente. Él es el dueño de la metáfora, él nos muestra las analogías, él sustenta el ingenio, él es la potencia de la fantasía, el juego de la imaginación. Dionisos simultanea los lenguajes de la imágen poética, la rebelión, la melodía primigenia y sobre todo esto se sustenta la solidez del cálculo, se resuelven muchos de los trabajos de Hércules, la "theoria", y las proporciones entre el "uno y el todo" o la armonia de las esferas.
EliminarHay más, hay más entre la razón y el arte, hay mucho más sumergido entre Escila y Caribdis.
Abrazos