jueves, 9 de febrero de 2017

Minimalismo musical



En el minimalismo musical distingo dos aspectos muy diferenciados, uno es extremado, radical, drástico, armónicamente inapelable y con estructuras rítmicas contundentes. Parece desarrollarse en un universo metropolitano, en un entorno sacudido por movimientos y trasiegos obsesivos.

El otro aspecto del mínimal es más retraído y huidizo, hasta cierto punto adusto. Algunos pueden ver en sus partituras un aspecto “levemente esquizoide”, aunque este calificativo me parece exagerado, voy a dejarlo simplemente apuntado, porque otros que saben mucho más que yo, así lo han calificado.

Entre los primeros, los metropolitanos, mencionaría a Philip Glass con su aria del acto III de Satygraha, la partitura de Étoile Polaire o sus Façades (1984). También, como ejemplos radicales, deberíamos situar muchas de las obras de Steve Reich y muy especialmente su Eight lines de 1983, partitura para piano, viola, violonchelo y clarinete bajo.

Entre los retraídos encontramos partituras de Glass, de Mad Rusch o de John Adams, de éste señalaría Shaker Loops de 1978 compuesta para orquesta de cuerdas, obra especialmente adusta.

No es extraño que un mismo compositor pase de un minimalismo metropolitano a otro “levemente esquizoide”. Podemos entender que del trasiego metropolitano se caiga, por reacción, a un estado de retraimiento. Podría aceptar una música más o menos callada, pero me costaría mucho admitir una somnolencia enajenante. Un movimiento obsesivo, con unas células rítmicas que se reproducen ad infinitum, puede derivar hacia un estado de negación sonora, donde el amodorramiento pasaría a formar parte de la estructura armónica; intuyo ahí un peligro, no quiero pensar en los mantras repetidos mil veces por los miembros de las sectas tibetanas ni en el ora pro nobis de las letanías.

8 comentarios:

  1. No entiendo de música, Francesc, o me gusta o me desagrada, así de simple soy.
    Pero a tenor de lo que dices con las letanías y el amodorramiento, la cosa es de cuidado. La música también sirve para adoctrinar.
    Los tibetanos cantan su mantra el mayor número de veces posible, haciendo que el pensamiento solo quede reflejado en los mantras y borrando todo pensamiento externo.
    Los del Hare Crisna te lo hacen contar 3.333 veces, así también te entretienes en el Hare Crisna, hare hare, hare sana, sana Crisna, Crisna Hare, pa que no te descuentes has de llevar unos rosarios.
    El cristanismo tres cuartos de lo mismo, pero ya hemos perdido la costumbre del Rosario, las letanías y los gozos del sufrimiento. ¿Y que decir de los árabes, que además han de hacerlo de cara la Meca, con lo que no solamente han de llevar el Corán, sino la brújula.
    Te agradezco la entrada y miraré de poner otro tipo de música más acorde con mi estado de ánimo.
    Amén.
    salut

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    1. Amic Miquel, me temo que hay más afición a los mantras y a las letanías que a la música avanzada.
      Salud

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  2. Cuando hablabas de minimalismo musical pensé también en Philip Glass. Un autor que me encanta siempre que sea en pequeñas dosis, pasando luego a otras cosas. Me pasa lo mismo con el Jazz Fusión o el flamenco de calidad. También me ocurre con una buena comida. Los atracones nunca son buenos.
    Un saludo, amigo Francesc.

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    1. Amigo Cayetano, Philip Glass es uno de los compositores más populares del minimalismo. Me gusta su obra más "metropilitana" también me gusta la música de Steve Reich.
      Saludos

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  3. Buuuffff vaya tema nos has traído, a mi me parece que en esto del minimalismo musical ocurre como con todo, hay un universo inabarcable en el que incluso los supuestos etiquetados de minimalistas reniegan de ello, luego hay otros que puedes etiquetarlos de minimalistas, experimentalistas o inetiquetables ... de los que nombras, Glass es el más conocido y sobre todo el más fácil de escuchar... ( al nivel de , Yann Tiersen, Michael Nyman aunque para mi gusto estos son mucho más ricos y variados en sus temáticas ) Steve Reich es taaaan repetitivo y lineal que sí, es verdad, tienes razón, este tiene muchísimo de esquizoide... yo le soporto obras máximo de media hora ... es tan machacón y reiterativo que no me producen sopor, si te soy sincera me termina desquiciando los nervios jajaja sin embargo fíjate ... un minimalista delicioso que escuchas levitando de gusto, de una calidad extraordinaria que no tiene nada que ver con ninguno de los que nombras es Arvo Pärt... y además a este hombre no podríamos encuadrarlo ni entre los metropolitanos ni entre los retraídos ... si acaso entre los místicos ... tiene una obra chiquitina pero deliciosa que meeencanta... a ver si te gusta ; )


    Muchos besos y feliz finde... relajado pero sin taladros cerebrales de estos casi dolorosos ; )

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  4. Querida María, el minimalismo es todo un universo, hay que saber separar el grano de la paja como en todas partes. Hay ruidos repetitivos que poco tienen que ver con la música. Glass es el más conocido junto con Nyman, éste a otro nivel, algo más comercial. Expresé mi experiencia sobre la música actual en

    http://francesccornado.blogspot.com.es/2016/07/musica-de-hoy-mi-experiencia.html

    allí comenté mi gran admiración por Arvo Pärt.
    Abrazos

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  5. Me sorprende gratamente tus conocimientos musicales, amigo mio, yo no entiendo mucho de música, pero cuando me gusta me hace vibrar hasta la medula.

    Un placer leerte.

    Un beso enorme.

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    1. Querida María, mis conocimientos musicales son los de un simple oyente. La música siempre me ha gustado mucho, para mí es una de las manifestaciones humanas que mejor nos aparta de la animalidad. En mi post http://francesccornado.blogspot.com.es/2016/07/musica-de-hoy-mi-experiencia.html
      hablaba de mi afición por la música.
      Abrazos

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