El próximo
otoño se celebra en Wiesbaden (Alemania) el LXXXVII Simposio sobre la
desmitificación (Entmythisierung Symposium)
En la edición de 2018 se abordará la influencia de las metáforas sobre el lenguaje.
En la edición de 2018 se abordará la influencia de las metáforas sobre el lenguaje.
Entre otras se
presentarán las ponencias siguientes:
Der Vorrang
der formalen Logik (Primacía de la lógica formal)
Die leere Metapher (La metáfora vacía)
Die Unzulänglichkeit der bildlichen Sprache (Insuficiencia
del lenguaje figurativo)
Die
traditionelle Auffassung der Metapher (Concepción tradicional de la metáfora)
Die Metapher
als Ornament (La metáfora como ornamento)
El Entmythisierung Symposium viene celebrándose anualmente desde 1927. Fue suspendido, sin embargo, durante la Segunda Guerra Mundial.
Antes de la interrupción por motivos bélicos, el simposio se
celebraba en la ciudad alemana de Jena y pasada la contienda pasó a celebrarse en
Wiesbaden.
En el simposio de este año tampoco se presenta ninguna ponencia en
español. Sólo en una ocasión, un oscuro y olvidado profesor de la Universidad
de Sevilla, el Dr. Antonio María García Malmo, presentó una comunicación sobre la
vulgarización del mito. Aquel informe académico del profesor pasó sin pena ni
gloria.
Al pensamiento analítico español no parece que le interese la
desmitificación. En nuestra literatura y en nuestra filosofía hay un exceso de
metáfora, de sueño y de profecía. Aquí se ha sacralizado demasiado. El ingenio
y la agudeza se han puesto al servicio de la metáfora extrema, impactante y
espectacular, bella por otra parte, pero, sin embargo, retórica y alambicada, a
veces en forma de alegorías muertas y otras veces como lamentos de pasión o
fantasías individuales que poco aportaban a la creación de un lenguaje
racional.
Hemos contemplado demasiadas imágenes dolientes y mientras
intentábamos construir un discurso racional, aparecían los estigmatizados mostrándonos
sus llagas.
El mito persiste y en vez ocuparnos de una desmitificación racional del pensamiento
estamos asistiendo al espectáculo funesto de la creación de nuevos mitos.
Cierto, nos gustan los mitos y los jaleamos.
ResponderEliminarNo ha mucho, en las puertas de la Audiencia Nacional, a un señor que patea una pelota y gana 243 euros al minuto todos los días del año, las hordas mitificadoras le fueron a felicitar porque por lo que parece la mitad de su jornal no pasaba por Hacienda.
En ocasiones, recordando la palabras de Bertrand Russell, aquello de ¿apariencia o realidad?, me pongo a pensar si es que los mitos a lo que ayudan es a hacer de "adormidera" de la masa. Al igual en esta sociedad son necesarios, a más mitos, menos manifestaciones por los derechos individuales.
salut
Amic Miquel, no espero casi nada de los mitos ni de los mitómanos; de los primeros una estética bien compuesta, pero de los segundos no deseo otra cosa que se alejen de mí y sobre todo que no tengamos que pagar todo el jueguecito de esta enorme ludoteca nacional.
EliminarAbrazos
Mitómanos. Un país de mitómanos. Parece que aquí se estila mucho eso de la leyenda, la exageración, la epopeya... Crear héroes donde tan solo hay villanos. Y no nos interesa desmitificar nada, sino, al contrario: crear más mitos. Y en ello andamos, aunque haya alguno o alguna que pase antes por la peluquería para "desmitificar" su imagen.
ResponderEliminarLo de "simposio" siempre me sonó mal, como "linotipia": a Fulano le ha dado un simposio o un ataque de linotipia. Y ya está.
Un saludo, Francesc. Buen fin de semana.
Amigo Cayetano, abundan las ensoñaciones, la exageración, los ídolos con pies de barro y los mitos de cualquier ralea y probablemente, sin dismitificáramos nos encontraríamos con unos seres pequeñitos con semblante horroroso.
ResponderEliminarLos del "simposio" aún se podría aguantar lo malo es que dijéramos el 87º "soponcio" de desmitificación (Entmythisierung Sopontium, ja, ja, ja.
Abrazos
Parece interesante el simposio, si sirve para aclarar.
ResponderEliminarMe gustaría que te hicieras, si no en una biblioteca supongo que aún se venderá, con el libro "Las extensiones interiores del espacio interior. La metáfora como mito y como religión", de Joseph Campbell. Son una serie de conferencias que dio entre 1981 y 1984 pero que aportan información muy interesante a mi modo de ver. Está editado por Atalanta en 2013.
Parafraseando, habría que decir "A las metáforas lo que es de la metáfora y a la razón analítica lo que le corresponde", suponiendo que ambas sean disociables del todo.
Un abrazo.
Amigo Fackel, puedo pensar que si llevan 87 años desmitificando o es que había mucho mito o ellos mismos se habrán convertido en un mito ¿No será, este simposio, también un mito? ¿o quizás la sombra de una ilusión? Quiero decir que ¿no será un deseo? Mucho me temo que no aclarará demasiado.
EliminarEn cuanto al libro, creo que lo tengo en alguna estantería o me parece haberlo leído, el caso es que Joseph Campbell es un referente indispensable, leí parte de Las máscaras de Dios y algo que hablaba de mito y metáfora.
Ya sabes, amigo Fackel, que una pensadora conocida habla de la razón de la metáfora.
Abrazos
Supongo que te refieres a María Zambrano. A mí me ha costado mucho comprenderla.
EliminarSí, a Zambrano me refiero.
EliminarAbrazos
Sería cosa de hacer algo similar aquí, los mitos existen para ser desmitificados. Un mito no es más que una recreación ideal que lleva directamente al engaño. Sin embargo, somo adictos a lo ilusorio. Bienvenida la indagación sobre los mitos y su influencia en la construcción de las sociedades modernas.
ResponderEliminarAbrazos
Amiga Amaltea, ahora ya hemos empezado, creo que lo siguiente puede ser la desmitificación. En cuanto al Entmythisierung Symposium, no te fíes demasiado, ya te contaré.
EliminarAbrazos