TONY OURSLER, Cy3 (2015)
Siempre que escribo poesía tengo la impresión de que nadie, por mis versos, descubrirá mi manera de ser.
Esta sensación ya la tuve cuando publiqué mi primer libro de poemas y ahora continúo convencido de lo mismo. Quizás esto sea debido al tipo de poesía que intento escribir, lejos de toda conmoción y enternecimiento.
Por mi carácter aplico ciertas dosis de humor e ironía y siempre eludo lo personal y tiendo a describir lo que veo.
Ahora leo en “El bosque sagrado” que T.S. Eliot dice:
La poesía no consiste en dar rienda suelta a las emociones sino en huir de la emoción; no es una expresión de la personalidad sino una huida de la personalidad. Pero naturalmente solo quienes poseen personalidad y emociones saben lo que significa huir de ellas.
Exacto. Hay que manejar con rigor la afirmación para poder navegar la negación. He recordado ahora que, tras cierto lance, y tras algunos comentarios de Astérix sobre lo ocurrido, completamente perplejo Obélix se preguntaba: "¿Cómo he podido hacer algo que no sé qué es?"
ResponderEliminarEl rigor es una de las características de la poesía.
EliminarSaludos
No puedo opinar, al conocerte personalmente mi opinión no tiene validez, sin embargo, escribir buena poesía está en las manos de pocos, muy pocos, y para escribir poesía se ha de tener personalidad. Por esta parte, cualquiera que lea tu poesía descubrirá sin mucho sacrificio que deja rastros de tu manera de ser.
ResponderEliminarTodo buen poeta deja rastro.
Un abrazo muy fuerte
Salut
Amic Miquel, cuando escribo poesía, repaso, corrijo, enmiendo y voy llenando la papelera de hojas escritas. La papeplera es una buena herramienta, la poesía exige precisión.
EliminarIntento apartar los rasgos íntimos de mi carácter y si no lo consigo creo que he escrito un mal poema.
Tú sabes como pienso y cuando lees mis poemas, tu lectura queda condicionada por el conocimiento que tienes de mi carácter.
Abrazos.
Hay que tener la cabeza fría y bien ordenada incluso para escribir poemas repletos de emoción.
ResponderEliminarUn saludo.
Amigo Cayetano, la poesía exige orden y rigor. Creo que la vehemencia y el arrebato no ayudan demasiado para escribir poesía.
EliminarSaludos
Admiro los poetas ordenados y rigurosos, les tengo muchísimo respeto.
ResponderEliminarA mi me pierden la vehemencia y el arrebato; claro que por eso- seguramente- mi poesía no es para todos.
Cayetano te envío un abrazo , yo tampoco te conozco personalmente; pero creo que tampoco tiene demasiada importancia.
Te deseo un buen fin de semana.
Querida Berta, seguramente es por mi profesión por lo que me acerco a la realidad y a la expresión poética procurando siempre el equilibrio. Temo que las pasiones y los arrebatos desequilibren los materiales aunque estos sean sustancias emocionales. Procuro una economía de recursos, seguramente por aquello de que cuanto menos haya, menos cosas se caerán.
EliminarAbrazos
Un abrazo, igualmente, Berta. Un placer.
EliminarTS es existencialismo, será que para hablar de poesía hay que afinar más el lápiz. Es absolutamente imposible dejar fuera al autor en cualquier forma de expresión, la que sea, hay que saber buscar, pero eso es otra cosa.
ResponderEliminarSí, Selva, hay que afilar el lápiz, dicho esto, coincido completamente con lo que dice T.S. Eliot.
EliminarSaludos
Un buen poema empieza en realidad cuando termina... Un buen poeta detecta aquello que el lector eterniza.
ResponderEliminarAbrazo hasta allá.
Amigo Carlos, esto es una cuestión de extremos.
EliminarAbrazos
Para mi la ironía es un síntoma de inteligencia, no conozco a ningún tonto con ironía. También creo aquello de "Dime de que presumes y te dire de que careces". Ante gente que se gusta mostrar como "mu sensible" en sus escritos descubres otras verdades cuando les conoces. En esto da igual prosa que verso, en mi opinión.
ResponderEliminarUn saludo.
Amigo Daniel, la ironía es una de las más altas expresiones de la inteligencia humana.
EliminarHay un virus tremendo que se llama sensiblería que infecta a la poesía, veo mucha poesía y mucha prosa publicadas infectadas por este maldito virus. Creo que se está fomentando la sensiblería; se hace desde las escuelas manipuladoras y desde los medios adoctrinadores.
Abrazos
No conocía esas palabras de T.S. Eliot pero las comparto totalmente, así como lo que le comentas a Daniel acerca del virus de la sensiblería, que afecta a la poesía y también a la prosa; incluso es particularmente patente en columnas de prensa y artículos de opinión.
ResponderEliminarY eso por no hablar de los obituarios de los diarios, donde con frecuencia el que lo escribe intenta ponerse medallas a sí mismo, casi como si él fuera lo más importante de la necrológica, enfatizando la enorme relación que tenía con el difunto, en algunos casos imaginaria.
Amigo Granuribe, la sensiblería está llegando a unos niveles impresioanantes. Todo parece observarse de una manera pueril, frívola y lacrimógena: se personalizan los aspectos generales y se contemplan bajo la irracionalidad de las emociones exacerbadas. Los medios de comunicación y las escuelas nos dicen que saquemos a flote nuestros sentimientos íntimos, que lloremos, que expresemos las debilidades...,
Eliminartodo esto es pornografía sentimental. Más de dos y más de tres creen que la poesía debe ser la expresión de esta pornografía chusca.
Salud