Quappi con suéter rosa (1932-34). Max Beckmann
Lo vemos en los documentales de la 2 sobre la fauna. Los machos siempre andan buscando brega, empeñados en marcar territorio, conseguir el mayor número de hembras y llegar a esparcir su simiente por todas partes.
Es la eterna lucha para conseguir el alimento y la perpetuación de la especie. Para ello utilizan cornamentas, garras y mandíbulas para agredir o muestran sus encantos de crestas encarnadas o pavoneándose luciendo plumas tornasoladas o de colorines.
El hombre es un animal más. También anda a la pendencia y al pavoneo. Utiliza la fuerza bruta ya sea con los músculos, ya sea blandiendo un kalashnikov o activando los misiles para marcar territorio (invasiones, anexiones, terrorismo, atropellos...).
Para conseguir la provisión del pan se vale de robos, aranceles, corrupción política y económica... y, para la perpetuación de la especie se dedica a esparcir su simiente por donde puede. Para ello pretende seducir con un aspecto de malote, morenazo tatuado de gimnasio, una especie de "fantasma de carne y hueso con mucho músculo y poco seso" o simplemente enseñando su cartera.
Ya no precisa únicamente de la fuerza bruta, gracias al refinamiento, ha conseguido que el dinero sea la principal herramienta de seducción.
El dinero ayuda a mantener las pasiones humanas, es inseparable de ellas. La fuerza del dinero es superior a la fuerza de unos brazos musculados.
La bestia humana culturizada es un animal interesado, no vive si no es con interés y si alguno afirma ser un desinteresado, lo que demuestra es que anda despistado y no sabe muy bien cual es su interés principal.
Sin embargo, afirmo también, que solamente se pierde el interés cuando uno ve que las fauces del lobo ya las tiene muy cerca y empieza a ver el final; entonces su interés ya no es suyo, su único interés es ver cómo su descendencia tiene intereses propios.
El dinero, y la pinta de malote, no lo dudes, ayuda a mantener las pasiones humanas, es inseparable de ellas.
ResponderEliminarPoco éxito en el ambiente tiene el buenazo, el de planta baja, el no conectado.
Poco éxito.
Aunque, me consta, el éxito de los fornidos de gimnasio y maqueados del tatoo, se cuentan por fracasos.
Salut
Miquel, también los malotes de tatuajes con mucho músculo y poco seso están metidos en la lucha por la perpetuación de la especie y muchas veces fracasan como una hiena inexperta.
EliminarSalud.
¿Las bestias humanas. dices?
ResponderEliminarhttps://elpais.com/internacional/2025-11-11/la-fiscalia-de-milan-investiga-safaris-humanos-en-sarajevo-viajes-a-la-guerra-en-los-noventa-pagando-por-disparar-a-personas.html
Sí, Fackel, he dicho que "el hombre es un animal más" y ahora añado que algunos pagan para jugar a francotiradores y poder matar a otros.
EliminarSalud.
Jaja Hoy, mi querido FRANCESC, estás de un inspirado subido, acabo de leerte en casa de Pedro y ahora aquí este otro despliegue genial ; ) Absolutamente de acuerdo, pero al lado de ese prototipo que tan bien describes con “ aspecto de malote, morenazo tatuado de gimnasio” están también los otros, esos otros de la cartera con el pelo teñido color zanahoria, pasados de kilos, que únicamente salen a respirar aire puro para descargar su rifle sobre alguna pobre lata o plato ( en el mejor de los casos) y con enorme bocaza, que según la abren sube el pan.. Mucho me temo que con semejantes sementales, ( el culturista y el baboso) la genética de nuestra especie va a degenerar en un ser mutante mitad gusano, mitad rata o rinoceronte con cara de rata ; )
ResponderEliminarMil gracias por estos ratitos .. ah! y por favor, discúlpame porque sé que sobre todo a ti y a nuestro querido GU, se os van a poner los pelos como escarpias cuando leáis la entrada que voy a colgar en cuanto la termine ; ) dadle una oportunidad por favor, no es lo que parece.. Un beso sonriente y agradecido!!
Sí, María unos se valen del músculo subido y otros de la cuenta corriente abultada, andan por aquí y por allá obsesionados y padecen como cualquier animalito perdido en la selva.
EliminarEspero tu entrada de tu blog. A mí será difícil que se me pongan los pelos como escarpias, eso de los pelos es una cuestión evidente que se puede apreciar viendo la superficie superior de mi cráneo.
Abrazos mil.
Homo homini lupus.
ResponderEliminarSí Cayetano, además ahora hay muchos que se empeñan en proteger al lobo que se come las gallinas.
EliminarAbrazos.
Tal cual, nada que añadir, estimado Francesc... terrible bestia humana...
ResponderEliminarBuena tarde, Francesc, abrazos
Querida Milena somos de la estirpe de Caín, ya sabes el asesino de la quijada de burro.
EliminarAbrazos.
Hablaría de poder, mejor que de dinero.
ResponderEliminarAmigo, Toy, poder y dinero suelen ir juntitos.
EliminarSalud.
En mi opinión, eso que comentasempieza a fraguarse en la adolescencia, que es una edad que conozco bastante bien, no en vano he "impartido clase " (?) a unos cinco mil en mi "dilatada carrera", entre el Eixample y el Vallés Occidental. Pues bien, en Ripollet, una zona algo deprimida, nunca vi a ninguna chica intentando ligarse al empollón, pálido y con gafas. Siempre al menos estudioso, más gamberro y más macarra, futuro crápula en ciernes, que ya se depila todo el cuerpo y se lo llena de tatuajes. A éste suelen añadirse otros con menos condiciones, pero que chupan rueda todo lo que pueden. Y a la inversa, estos futuros crápulas siempre se acercaban a las más llamativas, esas que llegaban al instituto a las ocho de la mañana con un dedo de maquillaje y ropa provocativa, con variada muestra también de tatoos. Los y las demás no se comían una rosca. En la academia del Ensanche, gente de más nivel económico y tal vez cultural, las preferencias no eran tan claras ni definidas. Luego la cosa sigue así y en los que llegan a la Universidad, el asunto se diluye. En los que no, va in crescendo y es lo quemás abunda.
ResponderEliminarPor lo que he oído decir a algunos compañeros docentes en los colegios de la parte alta de Barcelona, aparte de la chulería tipo pavo real, ya empiezan a primar los intereses económicos, a qué se dedican los padres, si tienen empresas, cosas así, quizá con ánimo (suyo o de los padres) de perpetuar la casta.
Un abrazo.
Sí, Gran Uribe, todo empieza en la adolescencia o casi en la infancia. Por lo que veo el chico bueno y aplicado, no le queda otro rol que ser el "pagafantas", por lo que veo el éxito del ligoteo lo ostentan los malotes "fantasmas de mucho tatoo y poco seso" los que incordian y que son los deseados por las jovencitas del maquillaje que citas.
EliminarSin embargo todo esto va cambiando según los estratos sociales, que en Barcelona coinciden con los estratos urbanísticos y sociológicos, van cambiando los intereses, pasan del interés por el tatuaje al interés por el grosor de la cartera.
Salud.
Hay seres bienaventurados que viven al margen del dinero, y no están locos. Gente cuerda que ha decidido vivir sin apego materialista. Así eran los místicos, y son ahora algunos artistas que desprecian los cenáculos de su gremio y solo aspiran a crear en paz y soledad. Claro que, en general, son ricos por familia y no han tenido que pasar por la rueda del trabajo asalariado.
ResponderEliminarme encanta la modelo de la pintura, es modernísima y su expresión es la displicencia más evidente.
Abrazos
Sí, Marga, son seres afortunados, tienen una autonomía material que les hace singulares, hemos conocido algunos y hemos comprobado que piensan de manera muy diferente a los demás. Otra cosa es el místico que es como una forma "chic" de la espiritualidad, otra cosa rara.
EliminarUn abrazo.
Francesc:
ResponderEliminarun buen resumen antropológico...
Una pregunta ¿por qué las hembras eligen al malote?
Salu2.
Amigo Dyhego, parece que el gusto por el "malote" es una cosa moderna, algunas dicen que les gusta un sujeto con pinta de malo pero que sea muy tierno por dentro (esto debe ser cuestión de las vísceras interiores, detectables con las ecografías) y en cuanto a los hombres parece que sus apetencias son los contornos. Todo esto es bastante raro.
EliminarAquí lo que ocurre es lo de siempre, la eterna lucha para conseguir la perpetuación de la especie y que se perpetúe creando individuos más fuertes, en nuestra civilización esto tiene mucho que ver con la dimensión de la cartera o de la cuenta corriente.
Saludos.