lunes, 8 de enero de 2018

Arte para inflar el buche de un sapo

La ramera de Babilonia, Biblia de Lutero (1534)
Imagen tomada del blog Fragmentalia  


El artista es capaz de aglutinar los matices y la variedad de la naturaleza en una expresión única. Mediante su acción creativa, el artista materializa una percepción o un sueño. Los sueños forman parte de la esencia misma del arte. Pero cuando los sueños eluden el matiz, el pensamiento único se apodera de la sensibilidad del artista, cuando esto ocurre, nos encontramos ante una percepción totalizadora sin valor artístico que pasa a formar parte del discurso del poder.

Desde el punto de vista de la creación de un lenguaje artístico crítico, podremos decir que una inversión del sueño debería estar unida a un pensamiento ilimitado y completamente autónomo.

El sueño degradado es un material eficaz para el fanatismo y sirve a los sistemas totalitarios que se satisfacen con un arte adocenado y dominado. 

El arte de los regímenes totalitarios es aquel que agrada a los "pequeños sapos con sueños de grandeza", - esta expresión tan genial es de mi amigo Dapazzi - Sí, este arte les provoca unos impulsos sin freno. Los dictadores se inflan como el buche de un sapo.

10 comentarios:

  1. En ocasiones, los sueños saben más que las vigilias, es una frase pronunciada por un chamán Lakota, de la tribu de los Oglala, una de las ramificaciones de los Sioux.
    Me ha venido a la mente por el significado de las palabras y el orden en que las has puesto.

    Un abrazo
    salut

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    1. Interesante, Miquel. Hay estudios de antropología que nos revelan significados especiales.
      Abrazos

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  2. Cuando el arte deriva en espectáculo, prima más más el atrezzo que el fondo, el decorado se convierte en asunto central y todo queda resuelto en bonitos fuegos de artificio. El arte se banaliza y pierde fuelle.
    Un abrazo, Francesc.

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    1. Amigo Cayetano creo que el arte-espectáculo es el que mejor representa nuestra actualidad líquida.
      Saludos

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  3. "pensamiento ilimitado y completamente autónomo"

    Bella utopía...

    Un abrazo

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    1. Sí amigo Luis Antonio, esto que puede parecer una utopía es la razón "sine qua non" para que el arte sea posible.
      Abrazos

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  4. Las ensoñaciones totalitarias no tienen nada que ver con los sueños creativos ni con la imaginación fructífera. Se nutrían de esoterismos varios y copiaban descaradamente elementos y estilos simbólicos del arte del pasado. Por mucho Speer que fuera Speer sus construcciones estaban desprovistas de originalidad, no aportaban nada nuevo y solo potenciaban, como mucho, los estilos clásicos y en concreto los aspectos de grandiosidad y fomento del poder. Pero para potenciar lo clásico ya existió el clasicismo y el neoclásico. Semejante observación habría que hacer respecto a la arquitectura del realismo socialista soviético. En el caso nazi hundieron la Bauhaus y en el imperialismo estalinista se acabó con las vanguardias. Sigo pensando en lo importante que es el grabado de Goya del sueño de la razón que genera monstruos. Sospecho que se sigue sin interpretar adecuadamente el sentido que quiso imprimir Goya en ese dibujo.

    El poder siempre encontrará profesionales que se denominen artistas para que alcen obras en loor y gloria de la ideología única. En la Antigüedad pudo suponer creación, no obstante el culto y exaltación que se pretendía con el encargo. Lo que el poder del siglo XX encargó como remedo y copia viciosa de lo antiguo no vale un real. También en España hay ejemplos de arquitectura del poder franquista y poco calor tienen sus edificios, tipo ministerios, arcos de la Victoria o Valle de los agarrotados.

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    1. En efecto, amigo Fackel, los sueños creativos que estan muy lejos de las ideologías totalitarias, sí.
      He leído dos interpretaciones del texto del grabado de Goya, la una diametralmente opuesta a la otra.
      Saludos

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  5. Y por eso el arte es susceptible de mil interpretaciones, siempre dinámico y con detalles que aparecen según cambia la mirada. Ese versátil significado es, precisamente, de lo que carece cuando se instrumentaliza al servicio de una causa. Reducido y multilado, el arte no es más que un despojo propagandístico.
    Por cierto, es una lástima que Fragmentalia no publique desde hace un año.Es un blog magnífico.

    Abrazos

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    1. Querida Amaltea, tantas interpretaciones como el número de espectadores multiplicado por el número de estados de ánimo que pueda tener el espectador en un momento dado.
      Me gusta mucho esto que dices, "el arte no es más que un despojo propagandístico" hay que tenerlo en cuenta para que no se infle el buche del sapo.
      No sé a qué es debida la interrupción en Fragmentalia, se entiende, sin embargo, que pueda haber un cierto cansancio. La realidad artística actual produce tedio.
      Abrazos

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