viernes, 25 de noviembre de 2016

UNA EXPLOSIÓN ROMÁNTICA



¿Qué me ha pasado?

Ayer en el Palau de la Música Catalana Barenboim tocó el cielo con sus dedos y tocó las teclas de su nuevo piano diseñado por él mismo junto al fabricante belga Chris Maene. Estuvo magnífico, austero, seguro y expresivo hasta el más sutil de los matices. 

Yo, militante anti-romántico, me encontré ante Daniel Barenboim con un programa romántico exaltado y, ante aquella maravilla, cedí.

Fue un tsunami enardecido, una explosión romántica. 
¿Qué me ha pasado?
No me arrepiento de mi contradicción.


Barenboim con su nuevo piano interpretó:
Schubert Sonata en La Mayor, D.664
Schubert Sonata en La Mayor D.959
Chopin Balada núm. 1 op. 23
Liszt Funérailles
Liszt Vals Mefisto núm.



10 comentarios:

  1. Los buscaré por el Spotify.
    Por otro lado, jamás imaginé que se podía diseñar un piano de forma diferente a lo establecido.
    Veo, por la foto, que se trata del conjunto interior de la caja.
    Un abrazo
    salut

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    1. Sí Miquel, búscalo vale la pena.
      La diferencia entre el piano Barenboim-Maene y los pianos convencionales es que en el primero no hay ninguna cuerda colocada en diagonal, todas son paralelas.
      Salud

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  2. Es que de vez en cuando una buena fabada es necesaria, por mucho colesterol que tenga. Sobre todo si el plato es de calidad y está bien hecho. Aunque solo de vez en cuando. Abusar no es bueno.
    Un abrazo, amigo Francesc.

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    1. Amigo Cayetano, fue un concierto memorable. Barenboim, magistral.
      Saludos.

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  3. Es que, en este caso, no importa nada que sea un repertorio romántico, la emoción que provoca Barenboim y su ingenio musical se eleva por encima de las convenciones y géneros.

    Abrazos

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    1. Sí Amaltea, una verdadera obra de arte, por encima de cualquier ismo.
      Abrazos

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  4. Te pasó que no se puede decir nunca que de este agua no beberé y que este cura no es mi padre.

    Pues quién sabe si no habrá sido tu conversión al neoromaticismo.

    Salud y buena música.

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    1. Amigo Fackel, te aseguro que antes de ir al concierto no sabía qué programa iba a interpretar el maestro Barenboim. Es un gran artista que admiro, y fui un poco a la aventura. Quedé entusiasmado, pero lo de "conversión" me parece una palabra muy fuerte.
      Salud

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  5. Entonces a mi, que soy absolutamente devota de los románticos me hubiera transportado al séptimo cielo, además justamente este nuevo piano es en realidad una versión actualizada del que en su día tocara Franz Listz así que sin duda su música sonaría a pura magia, me puedo imaginar los Funérailles con ese empiece que tiene atacando las notas como si quieran romperse el piano de pura vibración pinzando las cuerdas y luego el virtusionismo de Waltz No.1 d Mephisto, o esa maravilla de Chopin ... al lado de estas obras las de Schubert ( del programa que te leo ) casi quedan pequeñitas ... en fin, qué afortunadísimo has sido!

    Me alegro mucho que hayas podido disfrutar de algo tan fantástico, un abrazo grande y buen finde!


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    1. Querida Maria, un concierto memorable. La balada de Chopin con que se inició la segunda parte fue una interpretación única, una auténtica maravilla y le siguió los Funérailles donde la fuerza de los graves inundó el espacio modernista de el Palau (por cierto, edificio que cada vez me gusta menos).
      Barenboim fue una experiencia estética quedará en la memoria.
      Abrazos

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