sábado, 6 de octubre de 2012

Lo prefiero



No me gustan las playas solitarias, deben gustar a muy poca gente, pues por esta razón están solitarias.
Prefiero las playas con niños que juegan.

El gorrión vivaz, sencillo e inquieto me gusta más que las aves exóticas que lucen su plumaje de colores en los parques zoológicos o en los reportajes de National Geographic.
Prefiero el pájaro vulgar.

Detesto lo exótico, los paisajes abruptos con depresiones terribles y rocallas peligrosas. Los paisajes lejanos y  todo lo que está más allá, me resulta incomprensible, está demasiado lejos.
Prefiero el paisaje cercano.

No me interesan las extravagancias ni la magia de un suspiro, ni lo que hablan los silencios, ni un aliento imaginado, ni lo oculto.
Prefiero todo aquello que se ve.

Más ocultas aún me parecen las creencias del más allá, los espíritus y las almas en pena.
Prefiero lo que es material.

Me gustaría que las bellezas interiores afloraran a la superficie. Lo que queda dentro de la piel me resulta demasiado profundo.
Prefiero la belleza palpable.

El snobismo y la exclusividad producen en mi ánimo el mismo efecto que me produce el olor agrio de las cosas rancias.
Prefiero lo común, lo corriente y lo vulgar.

Y a todo esto añado la frivolidad del arte por el arte.
Estas formas artísticas no las prefiero.


25 comentarios:

  1. Resumiendo y en otras palabras, prefieres lo real, la razón, y su producto, lo razonado y lo razonable, y la libertad del gorrión que puede volar frente a las cárceles que te reprimen esa libertad.
    Es imposible no estar de acuerdo con tales pensamientos.
    Salud.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No creas, Carlos, tu sabes que muchos prefieren la exclusividad, la ensoñación y dicen que la belleza la llevan por dentro.
      Salud

      Eliminar
  2. Estoy de acuerdo en casi todo, porque yo si prefiero las playas desiertas. salut

    ResponderEliminar
  3. Supongo que entre vulgaridad y sencillez median todo un mundo y al menos dos docenas de abismos, Francesc. Si tuviera que elegir entre todas las preferencias que desgranas, sin dudarlo me quedaría con el gorrión, por su abierta -que no oculta- simbología, que quizá muchos no acierten a vislumbrar.

    Pero no creo que el gorrión sea vulgar, no, no lo creo...

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Amigo Javier, siempre antepongo la vulgaridad a la exclusividad, no me interesa el alto standing, ni las mansiones aisladas, prefiero los manjares sencillos elaborados con patatas, cebollas y guisantes vulgares, y el gorrión lo prefiero, también, incluso sin considerar su simbología.
      Salud

      Eliminar
  4. Yo acepto lo oculto como lo oculto que hay en nuestra mente, que se manifiesta cuando está maduro por sí mismo.
    Por lo demás, yo también soy partidario de lo cercano.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Amigo Ursus, que se vea, hombre, que se vea, que así lo disfrutamos mejor. Imagínate una persona que tenga una belleza oculta, pues habrá que pelarla para encontrar la hermosura.
      Salud

      Eliminar
  5. A esto le sumaría si me lo permites Francesc:que en lo cotidiano en lo corriente esta la verdadera filosofía de vida...-Pero no cómo una frase hecha sino como una realidad-Désde hace unos años tengo que ausentarme por tierras de nuestra querida España por motivos laborales y siempre en pueblos dónde hay arquitectura rural para poder después trabajar con la editorial y poder publicarlo en libros de texto...Nunca jamas había valorado nada hasta el punto de que las grandres Metrópolis estan llenas de grandes necios...-La sabiduría popular es riquísima.

    -Discúlpame por el rollo...sorry;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, querida Bertha, por estos pueblos encuentras mucha gente sensata, pero los necios, andan también por todas partes y en cuanto a la sabiduría popular tengo mis dudas, porque tengo dudas sobre la sabiduría.
      Salud

      Eliminar
  6. En este decálogo de la felicidad y el sentido común me quedo; y me he traido el cuchillo de cocina para pelar y picar esa oronda cebolla y el ajo, que hay que preparar un sofrito, que es al guiso lo que la trama a la novela.
    Salud

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Manuel, el sofrito es algo maravilloso, es quizás una de esas pocas cosas que tienen una dimensión mágica de tan incomprensible suculencia como de incomprensible es que haya fe en lo mágico.
      Salud

      Eliminar
  7. Ya lo dijo Serrat..."prefiero volar bajito, como un gorrión!...¡Despensa,escuela y siete llaves al sepulcro del Cid! Salu2

    ResponderEliminar
  8. que controversias amigo, comparto aquellas cosas simples de la vida, pero también otras que por intangibles no menos mundanas
    salut

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Omar amigo, ya sabes de mi materialismo. Pocas cosas aprecio más allá de lo tangible.
      Salud

      Eliminar
  9. Cuidado con abandonar lo intangible, a veces vuelve como un boomerang, por ejemplo, si me como unas setas sin estos ajos igual pierdo el mundo de vista, los ajos sirven para detectar sustancias venenosas o alucinógenas. Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lamarée, los venenos más mortíferos los detectamos con el microscopio, tienen sustancia, pero no espíritu. Los venenos los envasan en frascos pequeños, pero frascos al fin, en cambio los espíritus malignos nos los sirven con sermones y dogmas, total, simples entelequias para entretenernos o enagenarnos.
      Salud

      Eliminar
    2. Doy por sentado que todo el mundo sabe esto pero a veces según quién busca espíritus más allá de las setas, que ya es un decir.

      Eliminar
  10. No hay nada mas hermoso que lo simple y sencillo, tanto en lo que vemos como en lo que no vemos pero intuimos. La belleza está en como miramos, hacia dentro y hacia fuera.
    Es una alegría volver a leerte!
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mi querida Tati, cuánta alegría verte por aquí.
      No me refiero sólo a lo simple y sencillo, insisto en el valor de la materia aunque sea compleja, pero no quiero saber nada de la maraña espiritual, de la exclusividad que excluye y de las verdades ocultas.
      Salud

      Eliminar
  11. Si no fuera porque las cebollas me hacen llorar... a pesar de eso insisto en picarlas muy menudo y aguanto y sigo leyendo este texto que me devuelve la alegría y me hace conocerte un poco más. Al ver tus preferencias, llego a una conclusión de poco valor, que me gusta todo, soy de buen conformar y no pongo pegas.
    Salud

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No llores, Loli, ni por una cebolla, son vapores inconsistentes que no merece la pena que se llore por ellos.
      En definitiva, lo que vale es lo que tenemos a mano, degustado con calma y buen humor y no complicarse la vida con cosas exclusivas.
      Salud

      Eliminar
  12. A mi lo que realmente me gusta es la salud ,y vosotros pareceis bastante sanos.Os falta un poquito de limoncito ,para el ph.Un placer leeros !

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Naturalmente, Yeshua, la salud ante todo y en cuanto al grado de acidez, el preciso, o sea, mantener el ph cercano a 7.

      Salud

      Eliminar