miércoles, 17 de octubre de 2012

José Florencio Martínez



 

Scherzo de Florencia
Ponte Vecchio

Y desde el Ponte Vecchio
la luna que desdeñan en el Arno
los joyeros.


Via Ghibellina

Todas las lilas de un jardín cerrado
daban su aroma al huerto, satisfechas.
Pero en la tapia alguna saludaba
-gracias por escapar de la clausura-
también al viandante, sonriendo.


En la terraza de un café

-¿Sabes, Firenze? A veces, la belleza
no es sino un espejismo circular
abocado al abismo de la nada;
y al borde de ese abismo ahora doy vueltas
a esa nada sorbiendo un cappuccino
en la terraza de un café en que el tiempo
(que ha aparcado un momento sus corceles)
se deslíe como un terrón de azúcar.
Firenze, a veces, ¿sabes?, la tristeza
fluye bajo tus puentes como el Arno.

José Florencio Martínez
del libro Tríptico italiano
XXIX Premi de Poesia, Vila de Martorell 2004

12 comentarios:

  1. Supongo, Cornadó, que usted conoce personalmente a este poeta, si es así, y tiene oportunidad de hablar con él, le agradeceré que le transmita mi felicitación. Son unos versos extraordinarios.
    Gracias.
    J. Aubert

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    1. Aubert, estaré encantado de transmitir su felicitación al poeta.
      Salud

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  2. Cuantos ricordi me traen el Ponte Vecchio de la Toscana y su río Arno (Florencia).

    Preciosos estos poemas: me encanta el de Vía Ghibellina sera que soy una persona que necesita tener libertad siempre.

    Saludos Francesc

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    1. Amiga Bertha, el libro de José Florencio es una maravilla. Después de este "Tríptico italiano" publicó "Teseo no saldrá del laberinto", un libro extraordinario que tuve el honor de presentar.
      Salud

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  3. Musicalidad y armonía preñada de esa luz renacentista. Hace unos meses me hablaste de un poema de Joan Maragall, La vaca cega, otro poeta que admiro gracias a tí, Francesc:

    Topant de cap en una i altra soca,
    avançant d'esma pel camí de l'aigua,
    se'n ve la vaca tota sola. És cega.

    D'un cop de roc llançat amb massa traça,
    el vailet va buidar-li un ull, i en l'altre
    se li ha posat un tel: la vaca és cega.

    Ve a abeurar-se a la font com ans solia,
    mes no amb el posat ferm d'altres vegades
    ni amb ses companyes, no: ve tota sola.

    Ses companyes, pels cingles, per les comes,
    pel silenci dels prats i en la ribera,
    fan dringar l'esquellot mentre pasturen
    l'herba fresca a l'atzar... Ella cauria.

    Topa de morro en l'esmolada pica
    i recula afrontada... Però torna,
    i abaixa el cap a l'aigua, i beu calmosa.
    Beu poc, sens gaire set. Després aixeca
    al cel, enorme, l'embanyada testa
    amb un gran gesto tràgic; parpelleja
    damunt les mortes nines, i se'n torna
    orfe de llum sota el sol que crema,
    vacil·lant pels camins inoblidables,
    brandant llànguidament la llarga cua.

    Joan Maragall

    Salud

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    1. Manuel, José Florencio tiene una mente clásica, escribe muy bien. Es un buen amigo, es experto del clasicismo greco-latino y del Siglo de Oro español, ha escrito una biografía de Lope de Vega que es monumental.
      Salud

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  4. He encontrado esta versión en español de Miguel de Unamuno:


    Poema La Vaca Ciega de Joan Maragall

    En los troncos topando de cabeza,
    hacia el agua avanzando vagorosa,
    del todo sola va la vaca. Es ciega.
    De una pedrada harto certera un ojo
    le ha deshecho el boyero, y en el otro
    se le ha puesto una tela. La vaca es ciega.
    Va a abrevarse a la fuente que solía,
    mas no cual otras veces con firmeza,
    ni con sus compañeras, sino sola.
    Sus hermanas por lomas y cañadas,
    por silencio de prados y riberas,
    hacen sonar la esquila mientras pastan
    hierba fresca al azar. Ella caería.
    Topa de morro en la gastada pila,
    afrentada se arredra, pero torna,
    dobla la frente al agua y bebe en calma.
    Poco y casi sin sed; después levanta
    al cielo enorme la testuz cornuda
    con gesto de tragedia; parpadea
    sobre las muertas niñas, y se vuelve,
    bajo el ardiente sol, de lumbre huérfana,
    por sendas que no olvida, vacilando,
    blandiendo en languidez la larga cola.


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    1. Manuel, es un poema extraordinario, sin concesiones a la tontería, todo él podría dibujarse o filmarse. La traducción de Unamuno es muy buena.
      Maragall y Unamuno se carteaban, se han publicado muchas de sus epístolas y son un un tratado de estética interesantísimo y un documento importantísimo sobre el modernismo en España.
      hay un diálogo que más o menos reza así:
      - Unamuno: "a ustedes, los periféricos, la estética les ahoga".
      -Y el poeta respondía: "y a ustedes la ética les aplasta".

      Salud

      Unamuno.- A ustedes los periféricos, la estética les

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  5. Una ilustración perfecta para acompañar las palabras de un excelente poeta.

    Abrazo

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    1. Querida Amaltea, se trata de palabras aladas, por lo que nada mejor que este Perseo florentino.
      Salud

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  6. Me parecer perfecto este recordatorio de la estética y de la ética, ligado a unos territorios diferenciados. Lo tengo constatado. Saludos.

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    1. Lamarée. La poesia nos prové de sentido común, tanto como el latín.
      Salud

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