martes, 5 de julio de 2011

El cementerio de Worms


En el cementerio judío de Worms
se conservan tumbas del siglo XI
que prudentes se adaptan al paisaje.

Las chispas de la noche, entre los cipreses verticales, encienden rincones oscuros del pensamiento.

Dede lo alto del sicomoro contemplo el literario
flujo que se extiende del verbo a la mampostería
seca del muro altísimo y recuerdo a los hermanos.

Las chispas de la noche, entre las nubes frías, deslumbran la efeméride triste y la novedad.

A la sombra del palacio se han enredado las palabras
de la confusión y con cimientos de envidia
poco a poco se levantó una Babel sangrienta.

Las chispas de la noche, entre las sombras invisibles, descubren la dimensión de la oscuridad.

3 comentarios:

  1. las chispas de la noche, luciérnagas, estrellas, ánimas, fuegos fatuos, ojos furtivos...
    Exquisito.
    Un abrazo

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  2. Mi querido Omar.
    Son chispas que nos descumbren la dimensión de las sombras.
    Salud

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  3. Hermoso pesimismo el que va cantando, con una quietud admirable, en este poema. Te sugiero, Francesc amigo, que no lo quemes en la angostura de estos febles días de estío, en que desaparece el horizonte.

    Un abrazo

    Manuel

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